Sevilla: Sergio Rico; Mariano, Gabriel Mercado, Rami, Escudero (Sarabia, m. 53); Kranevitter (Ganso, m. 68), N'Zonzi; Kiyotake, Franco Vázquez, Vitolo; Vietto (Ben Yedder, m. 60).
Barcelona: Bravo; Sergi Roberto, Mascherano, Piqué, Mathieu (Digne, m. 26); Busquets, Iniesta (Denis Suárez, m. 34), Rakitic; Messi, Luis Suárez, Arda Turan (Munir, m. 75).
Goles: 0-1, Suárez (m. 53). 0-2, Munir (m. 81).
Árbitro: Gil Manzano. Amonestó con amarilla a Mercado, Busquets, Nzonzi, Mudo Vázquez, Luis Suárez,
Un gol en campo contrario es un gran regalo. Y si son dos, la fiesta se empieza a sentir de lejos. El Barça consiguió una victoria para redondear un partido muy complicado en la Supercopa de España contra el Sevilla. Luis Suárez volvió a marcar en partido oficial y Munir se reivindica como el cuarto delantero.
El partido fue muy disputado. Los dos equipos no dejaron ni un metro por crear. Pero un minuto de lucidez permitieron a los de Luis Enrique marcharse hacia Barcelona con una victoria importantísima.
Denis, Arda Turan y Luis Suárez hicieron que en dos minutos el partido cambiara de sentido. Fue al 54 cuando una jugada mágica hizo subir el primer gol al marcador. Fue el momento que el Barça cambió el chip y el partido cambió. Denis enviaba la pelota dentro del área, Arda la deja con el pecho y Suárez envía la pelota al fondo de la portería.
Uno a jugada que cambiar el sentido de un partido muy obstruido. Mucha presión de los dos equipos y un medio del campo atascado.
Muy pocas ocasiones y muy poco fútbol. A la primera mitad el juego se concentró en medio del campo, con pelotas jugadas por alto y pasadas en corto muy obsoletas. Ninguno de los dos equipos se sintió cómodo.
El juego azulgrana quedó reducido a la mínima existencia. Un planteamiento de Sampaoli con tres defensas y un medio del campo muy poblado hizo que el Barça no pudiera tener presencia en la zona de creación. Messi marcado muy de cerca por Mercado fue otro de los grandes desaparecidos.
La mala noticia fueron las desafortunadas lesiones de dos jugadores azulgranas a la primera mitad. Primero fue Mathieu, con problemas en el bíceps femoral, y después Iniesta con un fuerte golpe en la rodilla.
Las cosas iban mal, sin ocasiones y se marchaban dos jugadores que podrían haber desencallado el partido. En medio del campo ya no estaría la visión de Iniesta, y en la banda tampoco estaría la velocidad de Mathieu.
Un inicio de segunda mitad diferente y con una vertiente más ofensiva de los dos equipos propició la creación de espacios. Una jugada al primer toque y una genialidad de Arda Turan con una asistencia con el pecho, hicieron que Luis Suárez sólo tuviera que fusilar la portería de la Sevilla para conseguir el primer gol en el minuto 54.
Era el momento del cambio del partido. Los espacios llegaron y en una contra Munir consiguió el segundo y definitivo gol en el minuto 80.
La ida de la Supercopa en el Sánchez-Pizjuán acaba con buenas sensaciones. Victoria de prestigio y vuelta con más tranquilidad de la esperada el próximo miércoles en las 23.00h. El Camp Nou decidirá al campeón.