Nueva temporada y nuevas ilusiones en el corazón del Sporting de Mahón con el inicio de la Liga Femenina Autonómica, un hábitat especialmente proclive para el club de Bintaufa en tiempos recientes, en el que incluso llegó a opositar al título y al ascenso de categoría hasta el último partido del curso 2014/15. Sin margen para ello en el ejercicio anterior –el cuarto lugar fue su límite en la clasificación–, el presente alza el telón tras una sensible renovación en el seno de un grupo que sin embargo no rebaja por ello su grado de ambición.
Andrés Egea, técnico local de considerable recorrido, asume, tras un bienio al frente del juvenil blanquiazul, la dirección del equipo en lugar de Tolo Bagur. Su figura resalta en un ramillete de variaciones que dispone en el regreso de Clara Villanueva, ex del Barça y del Granada en la máxima categoría del fútbol femenino español, y en la incorporación de la jovencísima Paula Sintes, proveniente del Menorca, otros dos grandes focos de atención, así como en la permanencia en el proyecto de la experimentada Irene Olives, referente del grupo en su apogeo más reciente, que ultima su recuperación tras ser intervenida de la rodilla en verano.
«Hemos renovado el equipo, y de momento no nos imponemos ninguna meta, solo trabajar semana a semana, tratando de mejorar a cada partido que disputemos, pero eso no significa que empecemos de cero, al contrario. Este es un equipo que siempre ha luchado por los primeros puestos y quiero que siga igual», proclama el técnico Andrés Egea, en una exposición de su manual de uso para una temporada que encara como una suerte de «reto», pues «soy de naturaleza competitiva y quiero estar arriba, aunque insisto, trabajando y mejorando semana a semana, sin obsesionarnos con la clasificación y ya veremos hasta dónde podemos llegar; llevo 25 años entrenando y creo que este es el mejor método», abunda el preparador.
Para Egea no será este un año de rutina. Todo lo contrario, dada su incursión en la vertiente femenina luego de más de dos decenios en los banquillos. «Es un cambio, sí, pero no deja de ser fútbol. Quizá la mayor diferencia se nota en la fuerza y en la velocidad, pero en el resto es igual; táctica y técnicamente no hay casi diferencia con el equipo juvenil», analiza el entrenador sportinguista, «muy contento y muy cómodo», con un grupo «con muchas ganas de trabajar; las chicas quieren mejorar y responden bien a todo. Para un entrenador es fantástico manejar un bloque así, estoy encantado de la vida», enfatiza Egea.
Sobre lo que se encontrará el Sporting en la competición, el técnico natural de Es Castell prevé «una liga difícil, en Mallorca hay buenos equipos», y señala como favorito «al Marratxí», equipo que en el curso previo solo entregó el título en el tramo final. Sin embargo, el Collerense, un rival y un feudo siempre arduos, y adversario en la jornada inicial, es lo que ahora ocupa y preocupa en Bintaufa. «Será un partido complicado, pero también nuestro punto de partida, desde el que empezar a corregir o a insistir en lo que hagamos mal o bien; nos marcamos objetivos a corto-medio plazo», remata Egea. El Sporting y el fútbol femenino vuelven a reclamar el foco.