El presidente de la Federació Balear de Futbol, Miquel Bestard, considera «muy complicado» que la petición de la UD Mahón de que se amplíe el número de equipos en el grupo balear de Tercera División la próxima temporada prospere del modo que desean en San Carlos, si bien se desliga de cualquier responsabilidad en ese sentido, pues escapa «a mi competencia», es una cuestión «que debe resolver el comité de competición, no la junta directiva de la Balear ni yo, y que también afecta al Govern y sus presupuestos, pues los viajes interislas corren de su cuenta, algo tendrán que decir ellos», abunda el federativo.
Bestard, asimismo, asegura «no saber nada» sobre una reunión a tres bandas entre el director general de Deportes, Carles Gonyalons, él mismo y emisarios de la Unión para tratar el asunto. «Hoy -por ayer- estuve con Gonyalons y no me dijo nada», sostiene el mandatario del fútbol balear.
Bestard, ante todo, matiza que «tal vez, ojalá, pero no es seguro, haya una plaza más para Balears en Segunda B, pero yo estuve en Madrid hace días y no me lo garantizaron. Creemos que sí, pero no es definitivo; eso dejaría un hueco en Tercera, lo que no comprendo es que pudiendo haber una plaza, haya seis clubes que la reclamen». El dirigente, además, indica que «si el 26 de junio nos comunican que hay una plaza más en Tercera, se dilucidará en un partido entre Petra y Santanyí y suba uno de ellos dos, así lo refleja el reglamento y está aprobado en asamblea. ¿UD Ibiza?, bueno, a nosotros nos consta que lleva dos años en competición, luego su ascenso es legal. El Govern no nos advirtió de que hubiera ninguna irregularidad».