La Unión volvió a la liga arrollando al Atlètic Ciutadella en un duelo en el que fue de menos a más para acabar devorando a su rival en los 20 minutos finales.
El grupo de Romero no le metió el guante al partido hasta llegar al cuarto de hora. Hasta entonces, los bermellones, expeditivos atrás e intentando presionar arriba, contuvieron a los unionistas. Tugores evitó el primero con una gran mano abajo a Lacueva (15'). El marcador se abrió desde la esquina al cabecear Calero en segunda instancia que poco después remató al palo. Un robo de Jaume concluyó en el penalti de Sergi sobre Óscar. Natxo Pons tiró a la madera y en la misma jugada, contra letal rubricada por Lacueva para encaminar el triunfo. Del posible empate al 2-0 para alcanzar vestuarios.
Dueño del balón, la Unión se agigantó ante el bloque de Berto Moll que no pudo frenar el frenético ritmo que le rompía por las bandas. Un cabezazo fuera de Lluís fue la única opción visitante antes de encajar el tercero. Los veinte minutos finales fueron un festival de la Unión que impuso su velocidad de crucero atacando con muchos efectivos para romper con relativa facilidad la frágil cobertura del Atlètic que no pudo parar el vendaval.