Un año más la Gran Gala del Fútbol Balear 2018, la noche de las noches del deporte rey en las Illes, sirvió para entregarse los premios y las distinciones del curso pasado, así como reconocer y honrar las trayectorias de diferentes personalidades del fútbol autonómico, en un acto multitudinario que juntó, como cada año, a representantes de los clubes en Son Termens (Mallorca), como también de los jugadores, estamentos federativos y representantes institucionales.
Como ya sucediera en las anteriores ediciones, en esta gala organizada por la Federació de Futbol de les Illes Balears presidida por Miquel Bestard, con el apoyo del Grupo Serra, tuvo un notable acento menorquín, ya que tres nombres ilustres del balompié insular recibieron este lunes su tributo en Son Termens. Fueron sin duda unos de los momentos más emotivos en la gran noche del fútbol balear en Mallorca, cuando la Federació de Futbol de les Illes Balears tributó a Josep Rivas y a José Luis Gonzalo, hombres clave de este deporte en la Isla y que fallecieron este mismo 2018.
Con los ojos de la expedición menorquina presente en la Gran Gala brillantes y húmedos, la viuda de Rivas, Pepi; y una de sus hijas, Emma, recogieron el reconocimiento a toda una vida dedicada al fútbol, «por su inestimable labor», de Rivas, durante más de dos décadas secretario de la Junta Insular de Menorca y persona muy apreciada en todo el mundo del deporte en general. También el nombre de Gonzalo estuvo muy presente anoche en Mallorca, recibiendo el mismo homenaje, por todos sus años de dedicación al fútbol menorquín; principalmente, como delegado en Menorca de los entrenadores, a los que dedicó muchas horas de su vida. En este caso, fue el propio Virgili Juaneda, presidente de la JIM, quien recogería el recuerdo para el veterano directivo– también vocal de la FFIB– fallecido a principios de octubre, ante la ausencia de su viuda o algún familiar, quienes excusaron su presencia al estar todavía muy afectados por el fallecimiento de Gonzalo.
Y en este 2018, cinco años después que decidiera colgar las botas del fútbol profesional, el sobrio defensa central de Ciutadella, Biel Medina, era tributado también ayer noche en Son Termens, como una ‘Leyenda del fútbol balear'. Una larga década como profesional, repartida entre la Segunda División A y B (Hospitalet, Eibar, Leganés o Lleida) y un año en la Primera División de Chipre, con el Anorthosis. Un Medina que alegó motivos personales para no personarse ayer en la Gran Gala, recogiendo su galardón también Juaneda. Precisamente, el mandatario de la JIM, aseguró a «Es Diari» que en los tres casos, «son reconocimientos totalmente merecidos; a Rivas y Gonzalo, por todo lo que hicieron por y para nuestro fútbol. Y a Medina, por una dilatada trayectoria profesional», expresó.
La Gran Gala 2018– con el recuerdo aún fresco de la terrible desgracia que tuvo lugar en el Llevant mallorquín– fue presidida por Luis Rubiales, presidente de la RFEF y Miquel Bestard, máximo responsable del fútbol balear. A su lado, en la mesa presidencial, estaba también el propio Virgili Juaneda, presidente de la Junta Insular de Menorca.
Este año, la expedición de menorquines estaba formada por los también federativos de la JIM, Pedro Pons y acompañante; Toni Sintes, del Comité de Competición; Pedro Torres, presidente de la Associació Històrica del Futbol Menorquí y su esposa, Esperança Juaneda, presidenta del Atlètic Ciutadella; el coordinador de la asociación, Paco Perea; Manolo Pérez y María José Sánchez, directiva del fútbol sala en la FFIB; Maria Cubas, nueva secretaria de la JIM y la viuda e hija del fallecido Josep Rivas.
Destacados de la noche
Este año la Federació quiso rendir tributo al fútbol femenino y las principales entregas fueron para Cata Coll y Mariona Caldentey, jugadoras mallorquinas internacionales del Collerense y FC Barcelona. Mario Mola, Marcus Cooper Walz y Patricia Guijarro recibieron un reconocimiento extraordinario por sus grandes éxitos deportivos en triatlón, piragüismo y fútbol, respectivamente. La entrega de las Botas de Oro cerró una Gala inolvidable, con la Insignia de Oro a Marcos Asensio, del Real Madrid, entre otros muchos reconocimientos al fútbol mallorquín.
Un encuentro en el que se tuvo un especial recuerdo para 'Ultima Hora', en tributo a sus 125 años de existencia y presencia en la vida cotidiana de las islas. La presidenta del Grup Serra, Carmen Serra, recibió de manos del presidente de la FFIB, Miquel Bestard, un obsequio en conmemoración de esta onomástica.