La Liga Nacional Juvenil recobra su protagonismo tras quince días de parón con la disputa de la primera de las cinco jornadas que restan para su finalización y en la que el Atlético Villacarlos puede comenzar a escribir el epílogo al brillante torneo que está realizando. Con el título de campeón encaminado por parte del Mallorca, la atención está centrada desde hace algunas fechas en la batalla por la segunda posición, que otorga el ascenso a División de Honor, y que ocupa el conjunto de Es Castell con un colchón de puntos que se antoja casi inalcanzable para Cide y Atlético Baleares, sus perseguidores y además próximos rivales.
Calculadora en mano, al colectivo de Lluís Vidal le faltan cuatro unidades para alcanzar la gloria y lograr un hito histórico para la entidad que preside Joan Quevedo, ubicar al Atlético Villacarlos por primera vez en el selecto panorama nacional de la categoría juvenil de cara a la próxima temporada.