El entrenador del FC Barcelona, Xavi Hernández, cumplirá el contrato que tenía firmado hasta el final de la temporada 2024/25 y, tras una reunión con la cúpula del club blaugrana liderada por el presidente, Joan Laporta, ha hecho marcha atrás en su decisión, anunciada y reafirmada en varias ocasiones, de irse este verano y seguirá una campaña más al frente del primer equipo. Según confirmaron fuentes del club a Europa Press, que Xavi Hernández seguirá hasta 2025 «es cierto», tras el cónclave que tuvo lugar este miércoles, tres días después de perder el Clásico contra el Real Madrid (3-2) y decir adiós a LaLiga EA Sports, en casa del presidente blaugrana.
Un cambio de guión inesperado, ante las varias reafirmaciones del técnico de que se iría a finales de esta temporada, como anunció el 27 de enero de este año tras perder 3-5 contra el Villarreal y con la intención de lograr un cambio de ritmo y de poner fin a la «muy mala dinámica» que, entonces, tenía el equipo. «Antes de las preguntas, querría anunciar que el 30 de junio no seguiré como entrenador del Barça. La situación merece un cambio de rumbo y como 'culer' no puedo permitir esta situación. Lo tenía ya decidido pero creo que es el momento», aseguró Xavi ese 27 de enero tras la derrota contra el 'Submarino amarillo' y días después de caer en la Supercopa y la Copa del Rey.
Ese cambio de rumbo pareció funcionar. Con el paso de los días, el equipo halló más tranquilidad y con ello llegó también una mejora defensiva y una mayor finura ofensiva que se tradujo en un ascenso en la tabla de LaLiga EA Sports, llegando a la segunda posición y a no tener perdida LaLiga, con la ilusión de poder revalidar el título. Y, en la Liga de Campeones, tras los fracasos de las últimas temporadas, con las dos campañas anteriores quedando fuera de la 'Champions' en la fase de grupos y no dando tampoco con la tecla en la Liga Europa, esta edición se superó el muro moral de la fase de grupos. Los de Xavi ganaron, bastante bien, al Nápoles en octavos de final tras empatar en el Stadio Diego Armando Maradona (1-1) y ganar en Montjuïc con solvencia (3-1). Y, recientemente, compitieron ante el poderoso Paris Saint-Germain de Kylian Mbappé, Ousmane Dembélé y compañía, ganando en París (2-3) y teniendo todo de cara en Barcelona con un 1-0 inicial. La expulsión de Ronald Araujo a la media hora lo cambió todo y, al final, hubo goleada parisina (1-4). Decir adiós a la 'Champions' de esa manera hizo daño, pero el Barça se reencontró con una versión propia capaz de competir bien, de tú a tú, en fases avanzadas de la máxima competición continental. Este pasado domingo, en un Clásico con gusto a final liguera, el Barça perdió (3-2) en el tramo final un choque que tuvo miga arbitral, con el club blaugrana empeñado en que no se dio un gol legal (tanto fantasma) de Lamine Yamal. Y en esta semana post Clásico, donde se perdieron las escasas opciones que todavía sobrevivían de optar a LaLiga y de no tener un año en blanco, sin títulos, el club hizo buenos los rumores que apuntaban a una posible continuidad del técnico egarense. Este miércoles, en casa del presidente Joan Laporta y con los 'mandamases' del club, se confirmó la marcha atrás de Xavi.
La dimisión en diferido del técnico blaugrana quedará, finalmente, en nada. Cumplirá con el contrato que tenía firmado hasta finales de 2025, con la intención de que el mejor rumbo que cogió el equipo tras su anuncio de dejar el banquillo siga progresando en la próxima campaña. Ese «equipo en construcción» de Xavi tendrá más tiempo para poder verse culminado. A finales de noviembre de este año, si no hay imprevistos, el nuevo Spotify Camp Nou estará listo para jugar en él. Y, con ello, habrá inyecciones económicas en las arcas del club, y un chute de ilusión y de mirar al futuro con optimismo en el entorno. Algo que podría beneficiar a Xavi y a sus jugadores. Pero esta rectificación, esta salida anunciada convertida en un 'me quedo', llega tras muchas, incontables, respuestas de Xavi a la prensa asegurando que la decisión de irse era inamovible. Así que, a falta de saber el motivo real, parece que la insistencia de Joan Laporta, del vicepresidente primero, Rafa Yuste, del director deportivo, Deco, y el entorno han hecho cambiar de opinión a Xavi. «Las suposiciones ahora son positivas todas. Antes eran todas negativas, las de la mayoría. El hecho de cambiar la dinámica es esto. Hace tres meses que no perdemos un partido y esto ayuda. Pero ya al día de la decisión, la suposición ya era positiva. No hice nada más que cambiar la dinámica a positivo y la decisión de irme no va a cambiar», señaló el técnico el reciente 12 de abril. Sin títulos en juego, con 6 partidos por disputar en LaLiga y el objetivo de sellar la siguiente 'Champions', habrá que ver cómo sienta al equipo esta nueva decisión de Xavi, tomada mancomunadamente con una cúpula que sigue apostando por él. Sin saber cuánto dinero habrá para nuevos fichajes, presumiblemente poco, el técnico blaugrana rectifica para seguir hasta junio de 2025 salvo que algo, o alguien, vuelva a hacer cambiar a quien lleva el timón de la nave blaugrana.