Cuando el turco Arda Güler firmó la victoria contra Georgia con un maravilloso zurdazo desde 30 metros se transformó también en el debutante goleador más joven de la historia de la Eurocopa 2024, por encima de Cristiano Ronaldo, al que reta este sábado en Dortmund con la primera posición del Grupo F y la clasificación lista para el vencedor del duelo entre Turquía y Portugal.
Veinte años hay de diferencia. Del primer tanto de Cristiano Ronaldo, también en su primer encuentro del torneo, con 19 años y 124 días en 2004, al primero de Arda Güler, con 19 años y 114 días el pasado martes contra Georgia, sin el que nada habría sido igual para Turquía, que se posiciona ahora para competir contra Portugal hasta por el liderato.
El astro portugués enfila su tramo final. A sus 39 años. El coleccionista de récords en esta Eurocopa, el mejor goleador de todos los tiempos de Portugal, aún es la figura indeleble de la selección lusa de Roberto Martínez. Un titular indiscutible, autor de trece goles en doce duelos a las órdenes del técnico que lo reactivó en el equipo nacional desde Qatar 2022. Nunca ha batido la portería de Turquía, en ninguno de sus tres enfrentamientos.
A la vez, el pujante joven turco, en su primer año en el Real Madrid, inicia su recorrido, pletórico de convicción y goles, trasladado a la Eurocopa 2024, en la que causó sensación en su puesta en escena. Reclutado directamente para el once por Vincenzo Montella, su incursión en su primer gran torneo internacional fue magnífica, para hacer creer a Turquía en otros límites diferentes a los que fijaban los pronósticos.
El conjunto otomano apareció en la Eurocopa repleto de inquietudes, sin una sola victoria desde el pasado noviembre, con derrotas tan estruendosos como el 6-1 con el que lo arrolló Austria en marzo, doblegada en el último compromiso preparatorio por Polonia (2-1), competencia en este torneo, pero entró en la competición con un triunfo prometedor.
Ya lo es de antemano, ha superado ya incluso su actuación anterior (cero puntos en 2021), y lo será aún más si es capaz de extenderlo este sábado contra Portugal, que son palabras mayores.
Uno de los favoritos de la Eurocopa, por más que la secuencia de hechos del primer partido y el sufrimiento con el que primero lo sobrellevó y después lo solucionó invitan a una reflexión para el equipo luso, que necesita más desborde, más imaginación, del que propuso contra la República Checa.
En la nómina de imponentes futbolistas de su convocatoria, con los 26 aptos para el partido del primer día, con el triunfo por 1-2, y para el de ahora, una vez que todos se entrenaron sin novedad ni sobresaltos en la mañana de este viernes rumbo ya a la ciudad de Dortmund, el escenario del segundo choque que lo expone y lo exige más.
Portugal compite contra Turquía y contra las expectativas que surgen del proyecto de Roberto Martínez, ganador de los once partidos que ha dirigido de competición oficial, aunque si se añaden amistosos ha perdido dos de sus cinco duelos más recientes, y de la cantidad de recursos que maneja en el equipo, entre el debate que monopolizó parte de la irrupción de Portugal en la Eurocopa de si era la mejor generación de la historia lusa.
Diogo Costa, Bruno Fernandes, Rafael Leao, Ruben Dias, Vitinha, Bernardo Silva, Diogo Jota, Nuno Mendes, Cristiano Ronaldo... Y Joao Félix, aunque el delantero del Atlético de Madrid, cedido el último año al Barcelona, empezó la competición sin un solo minuto, en el banquillo de principio a fin ante la República Checa, pese a la necesidad ofensiva del equipo.
Portugal ha ganado cinco de sus seis duelos a lo largo de la historia ante Turquía, con 15 goles a favor y cinco en contra.