El partido de Segunda División entre el Real Zaragoza y el Racing de Ferrol de este sábado, resuelto con victoria local por la mínima (1-0), quedó marcado por una gran tangana final en la que se produjo una acción injustificable, el brutal cabezazo de Cristóbal Parralo, entrenador del conjunto gallego, a David Navarro, técnico rival.
La pelea se desencadenó al final, justo tras el pitido del colegiado que puso fin a un tenso encuentro. Esa tensión, sin embargo, no quedó dentro de los 90 minutos de juego, pues fue más allá y explotó en una pelea que implicó a los dos banquillos.
Todo fue captado por las cámaras de Movistar+, que muestran como David Parralo se acerca a su rival y le propina un fuerte cabezazo en el rostro. Se desconocen los motivos, aunque ambos técnicos se expresaron sobre lo ocurrido en la rueda de prensa posterior.
"Prefiero no decir lo que pienso porque creo que todavía es muy reciente. Tengo una sensación que hacía tiempo, muchos años que no sentía. Prefiero no hablar de lo que ha pasado porque hacía mucho tiempo que no tenía esa sensación. No es un ejemplo bueno para el fútbol. Lo que ha pasado ha sido terrible y no quiero hablar de eso", dijo Parralo antes de excusarse en la actitud que siempre ha mantenido en los banquillos y dejando entrever una provocación del técnico rival.
"Quiero pedir perdón a mi club porque me han expulsado. El porqué me han expulsado es otra cosa. No estoy orgulloso de que me expulsen ni de entrar en esa situación. Pero, como ya he dicho otras veces, somos personas. También tenemos sangre en las venas. Muchas veces hay cosas que no son justificables. Podrá, o podrán, contar las milongas que quieras, pero solo hay que ver las trayectorias. Ver si esto en mi caso, que llevo una tarjeta amarilla en toda la temporada, es lo normal. De hecho, hay mucha gente del Real Zaragoza, que es un club señor, con grandes profesionales a los que conozco a mucha gente desde hace años, como Alberto Belsué, el delegado, o el doctor, y hemos hablado", zanjó al respecto.
Desde el otro lado, David Navarro, quiso bromear sobre lo ocurrido y quitar importancia: "Estoy entero. Las cosas que pasan en el campo se quedan en el campo y ya está. No pasa nada. La noticia es que el equipo ha vuelto a dejar la puerta a cero, ha vuelto a ganar, se lo ha vuelto a ganar... En el fútbol parece que tú tengas que hacer, pero cuando yo trabajaba en el banco no tenía a nadie que me apagara el ordenador, me tirara de la silla o me tirara los papeles", culminó al respecto.
Se prevé una dura sanción para Parralo
El momento fue anotado por el colegiado en el acta del partido y, muy probablemente, sea sancionado acorde a lo que dicta el reglamento en estos casos:
Agredir a otro/a, sin causar lesión, ponderándose como factor determinante del elemento doloso, necesario en esta infracción, la circunstancia de que la acción tenga lugar estando el juego detenido o a distancia tal de donde el mismo se desarrolla que resulte imposible intervenir en un lance de aquel, se sancionará con suspensión de cuatro a doce partidos.
Eso sí, esta agresión entre técnicos cuenta con varias aristas a analizar: entrenadores implicados, posible provocación previa, la posibilidad de que el agredido presenta una denuncia por la justicia ordinaria... condicionantes que pueden hacer que quede en una suspensión de un buen número de partidos o que el castigo se transforme en una sanción de varios meses y que pueda incluir una sanción económica.
En cualquier caso, la decisión no se conocerá ya hasta después de año nuevo, al regreso de la competición después del parón navideño.