Sorprendido por el recibimiento y con una amplia sonrisa ha aterrizado en Mallorca Adrián Abadía. El que será el primer saltador balear en competir en unos Juegos Olímpicos lucía en el cuello la histórica medalla de bronce obtenida junto al canario Nicolás García Boissier en el Campeonato del Mundo de Doha, en trampolín de tres metros sincronizados. La primera medalla para España en ese evento y la que les da el billete para París 2024, en los que debutará con 22 años ya cumplidos.
En Son Sant Joan esperaban emocionadas su madre (Maritza), su hermano (Marlon) y la persona que le apuntó a saltos y que ha sido clave para llegar a este punto, su abuela Marlene. Junto a ellos, una representación del Club Saltos Mallorca, con algunos de sus jóvenes deportistas, técnicos y padres, además del entrenador de toda la vida de Adrián, el italiano -y olímpico en Sydney 2000- Donald Miranda.
La comitiva la completaron el director general d'Esports del Govern, Joan Antoni Ramonell; el gerente de la Fundació per a l'Esport Balear, Eladi Huertas, y el director general d'Esports del Ajuntament de Palma, David Salom. Todos participaron de un momento cargado de emoción para Adrián y su gente, que han visto «recompensados muchos años de trabajo y sacrificios», recordaba el saltador internacional, que en unos días participará en la Copa del Mundo de Montreal (Canadá).
«Este año yo y mi compañero (Nicolás García Boissier) estamos en Madrid trabajando focalizados en los Juegos, primero en el Mundial, claro, pero sacar esta primera medalla para los saltos en España es algo único, especial», explicaba ya rodeado de los suyos Abadía, que se siente «orgulloso» de este bronce que espera «sirva para reivindicar a nuestro deporte y que se hable de él».
Recordó, además, que el objetivo inicial era «sacar plaza olímpica», pero con el paso de las rondas, se vieron con opciones más que serias de pisar el podio. Ahora, en París 2024, estando entre los ocho mejores dúos del planeta, «vamos a disfrutar la experiencia, pero también a hacer lo mismo que en el Mundial, aunque intentaremos aumentar la dificultad para poder estar de nuevo delante, porque seremos las mismas ocho parejas, pero con un mayor grado de exigencia», explicaba el flamante bronce olímpico formado en el Club Saltos Mallorca y el CTEIB de la mano de Donald Miranda.
De cara a pelear por medalla en los Juegos de París, tiene claro Abadía que «hay que saltar muy bien para estar delante, peor vamos a repetir lo del Mundial, o por lo menos a intentarlo», deseando que esta medalla de bronce en el Mundial «ayude a que la gente crea en este deporte y en nosotros, en nuestro trabajo», además de poner en valor «el trabajo del CTEIB y de los clubes a la hora de fomentar los saltos entre los más jóvenes», proseguía el deportista.
De nuevo, Adrián tuvo palabras de agradecimiento para su madre y su abuela, «que es la que me apuntó a saltos y son las que siempre han estado a mi lado. Por eso va por ellas», resaltaba el nuevo referente de los saltos en España y el primer balear que será olímpico en esta disciplina.