A poco para el cierre de la edición el delantero catalán del Sporting Mahonés, Manel Sala, todavía exhibía el estatus de jugador azulón, aunque finalmente, a última hora, el club que preside Paco Segarra confirmó que el jugador había aceptado la propuesta del CF Burgos, que esperaba la respuesta de Sala.
El jugador, más cauto, declinó hacer cualquier tipo de declaración o valoración "a la espera de que todo esté firmado" puesto que ayer noche no había estampado su firma en ningún documento. Desde primera hora de la mañana en Burgos corrió el rumor de que el jugador se encontraba cerca de fichar por el club, una decisión que se hizo de rogar en boca de Manel Sala, que contó con todo el día para meditárselo.
A pesar de que las cifras de la operación no se han hecho públicas, la postura del Sporting era la de no tener que correr con ningún gasto, que debería correr del lado del equipo que quisiera fichar al jugador. Este aspecto alejó a Sala, en un principio, de la órbita del Atlético Baleares, mientras que acercó al catalán al Burgos, un equipo que se encuentra inmerso en una feroz lucha por el liderato del grupo VIII de la Tercera División.
La segunda b, un aliciente Uno de los aspectos que podrían haber terminado de decantar la balanza es una cláusula en el contrato que garantizase a Manel Sala la renovación de su vinculación automáticamente en el caso de que a final de temporada el equipo burgalés consiga el ascenso a Segunda B para que el jugador mantuviera la categoría y le permitiera tener una nueva oportunidad. Aunque nadie lo ha confirmado, desde Burgos reconocen que es una cláusula que utilizaron para convencer y fichar a Pablo Sierra del Sant Andreu, ex primera división, la semana pasada. De hecho, muy mal se tendrían que poner las cosas para que el posible nuevo equipo de Manel Sala no lograra ascender de categoría puesto que es segundo, a un punto del primer clasificado, el Real Valladolid B. La participación de Manel Sala este año en el Sporting Mahonés dista muchísimo de la mejor versión del delantero catalán que, tras comunicarle el club que no contaba con sus servicios, ya ha encontrado un nuevo destino.