El Valeriano Allés Menorca se jugará el pase a la final de la Superliga pasado mañana, en Burgos. La victoria de ayer (3-0) da cuerpo a la posible proeza porque iguala la eliminatoria a dos triunfos para cada equipo y por lo tanto ésta se decidirá en el quinto y último partido, eso sí, en cancha ajena.
No era una quimera pero sí, nada fácil. Derrotar en los dos encuentros en Ciutadella al Burgos era posible, pero las sensaciones con que venía el conjunto de Fiorenza a esta tarea no eran las mejores. Dos derrotas más o menos claras en Burgos realizando un juego bastante mejorable, no eran una garantía para poder realizar una gesta (vencer tres encuentros consecutivos para estar en la final). El primer paso era vencer al Burgos dos veces en tres días, algo que no se había conseguido en los dos encuentros de la fase regular. Pero el Valeriano lo hizo, el de ayer de forma clara y rotunda, y las esperanzas de conseguir el objetivo se ven ahora más reales. Incluso las sensaciones son ahora más favorables al conjunto de Ciutadella que al del Burgos, que se fue muy tocado y con la moral muy por debajo de la que tienen las chicas del Valeriano.
Pero el partido del miércoles, será otra historia, y si apelamos a lo vivido en estos cuatro encuentros, el factor pista puede ser decisivo. El Valeriano intentara que esto no ocurra, dar la sorpresa, plantarse en la final y seguir haciendo historia.
Empezó el partido con el Valeriano acertadísimo en todas sus acciones. 5 a 1 y primer tiempo de Pérez. No surgió efecto de inmediato a pesar de los aciertos de Miloserdova por el centro, ya que no le funcionaba el bloqueo. La buena defensa de ambos conjuntos tenía un matiz, el Valeriano acertaba en sus remates y el Burgos no, de ahí el 11-3 que obligó de nuevo a Pérez a parar el partido. Empezó la reacción el Burgos de la mano de Soraya para colocar a su equipo a tres puntos (14-11). Un error arbitral en contra del Burgos y otro en el saque de Alves mantenían al Valeriano por delante (20-16) en el tramo final. El carácter de Sara González fue contrarrestado por Daniela Patiño para llevar a su equipo a imponerse en el primer parcial.
Se puso por primera vez por delante en el partido el Burgos, con el primer punto del segundo set, que tuvo un inicio más equilibrado. Un par de errores claros del Valeriano llevaron al Burgos a adelantarse (4-7). Fiorenza tuvo que pedir tiempo muerto. Poco a poco el Valeriano le fue comiendo terreno al Burgos con una inspirada Sandell que remató para colocar el 13-14. Mantuvo aún la distancia un punto arriba el Burgos hasta el 15-16, pero el nuevo tirón del Valeriano ya fue definitivo. Acertado en la defensa y en el remate, no tuvo piedad del Burgos al que le endosó un parcial de 10 a 5 para llevarse también el segundo set y encarrilar el triunfo.
El tercer set fue un visto y no visto. El Burgos, totalmente descentrado, se veía impotente ante un Valeriano demoledor. A pesar del inicio igualado (2-2), las locales se fueron distanciado poco a poco de su rival al que obligaron a parar el partido. Esfuerzos inútiles con un Perez muy molesto y que ni siquiera daba instrucciones a sus jugadoras. El partido era de claro color local ante un Burgos con la cabeza más puesta ya en el quinto partido que en intentar remontar éste.
Jugó muy cómodo el Valeriano los últimos puntos ante la escasa resistencia visitante. Certeras en todas sus acciones las de Fiorenza jugaron a placer los instantes finales ante un público entusiasta que sueña, como no, en vencer el miércoles y seguir disfrutando de voleibol esta temporada con una final ante el Aguere.
Fiorenza: "Lo importante era no perder la fe"
Adrián Fiorenza, técnico del Valeriano Allés expresó su felicidad por la victoria y explicó el partido señalando que "ha habido que luchar al máximo porque si nos descuidábamos el Burgos nos cogía. Pero lo importante era no perder la fe cuando íbamos dos victorias abajo y hemos logrado empatar la serie. Ahora, en Burgos, será un cara o cruz".
Fiorenza no quiso señalar que el Burgos tenga ahora mayor presión por tener que jugar en su propia cancha el partido definitivo de este próximo miércoles, e indicó que "los dos tenemos la misma presión porque los dos queremos llegar a la final".
Respecto al encuentro, dijo que "yo esperaba la reacción del Burgos en cualquier momento, pero por suerte no ha llegado". Añadió Fiorenza que "algunas de sus jugadoras titulares no han conseguido ningún punto hasta llegar al tercer set".
Fiorenza también valoró el apoyo incondicional de la afición de Ciutadella, "yo no recuerdo una afición tan ruidosa y tan volcada como ha sido la nuestra hoy en los dos años que llevo ya en Menorca".
El entrenador argentino también se refirió al Jamper Aguere, brillante finalista de la Liga y que ahora aguarda a ciudadelanas o burgaleses para jugarse el título de campeón. El técnico dijo que "es bueno para el voleibol español que Aguere haya llegado a la final tumbando al siempre favorito Murcia a pesar que éste ya cuenta con todas sus jugadoras". (Santi Gomila)