"Hacía tiempo que lo pensaba, se lo comenté a Juli (Martí), y ya que se hace en Menorca me pareció el sitio ideal para ponerlo en práctica", asegura Raúl Riudavets, uno de los dos menorquines que participará el domingo en la segunda edición del Extreme Man 113 Menorca de triatlón, poniendo en práctica una iniciativa muy solidaria y que espera que tenga continuidad. "Hemos apostado diez euros con veinte personas de nuestro entorno a que acabamos la carrera, en total 400 euros que donaremos a ASPANOB (Associació de pares de nins amb càncer de Balears)", señala.
La intención de ambos es repetir la experiencia en años venideros, destinando los fondos recaudados a diferentes asociaciones de este tipo y que el resto de participantes también se una a este proyecto. "Este año ha sido un poco precipitado pero para el año que viene nos gustaría llevar también la iniciativa al club de Ciutadella y que cada participante aporte veinte personas más", asegura Riudavets, miembro del Sant Lluís Triatló, como Martí.
A pesar de esa precipitación a la que hace referencia, la empresa finalmente se pondrá en marcha tras obtener el visto bueno de la organización y ponerse en contacto con la asociación beneficiaria, que además de acoger la iniciativa con los brazos abiertos, montará una mesa informativa durante la carrera (en Fornells) para todas aquellas personas que quieran colaborar.
"Estamos muy contentos, se pusieron en contacto con nosotros, nos explicaron su idea y me parece muy bien que desde el deporte ayuden a asociaciones como la nuestra", asegura Marga Pons, responsable de ASPANOB en la Isla.
Ahora tan sólo falta esperar al domingo y que los dos triatletas completen la prueba, tal y como han acordado, para hacer realidad el desafío, algo que parece más que probable si tenemos en cuenta que Martí fue el año pasado el mejor insular -sexto clasificado- y Riudavets es un habitual en este tipo de eventos.