No pudo cerrar la temporada Guillem Martí con el título de campeón de Segunda División B. El Tenerife ganó el partido de vuelta disputado en su campo (2-1) ante el Deportivo Alavés con el delantero de Es Mercadal como titular y jugando los 90 minutos, pero cayó en el resultado global (3-2).
Martí, que ha tenido una participación menor que la del resto de sus compañeros y cuyo final de temporada ha estado condicionado por una lesión en los abductores, saltó en el once de inicio en un partido que el Tenerife debía remontar el 2-0 adverso cosechado en el partido de ida en el histórico estadio de Mendizorrotza. Pronto mostró buenos detalles de calidad ya que el 1-0, a los 8 minutos, nació de una acción por la que peleó Martí y que provocó un fallo defensivo que aprovechó el otro delantero tinerfeño, Aridane.
El Tenerife logró empatar la eliminatoria en el minuto 23 cuando Aridane, bigoleador ayer, conectó un cabezazo a pase de Cristo Martín.
Los más de 10.000 espectadores que se acercaron hasta el Heliodoro Rodríguez López vibraron entonces ya que la eliminatoria estaba abierta pero pasada la mediahora, Viguera transformó un penalti que significó el 2-1.
Error garrafal del árbitro
En el tramo final de la primera parte, el colegiado Ramón Arias Madrid sacó la segunda tarjeta amarilla a Juanma pero no le expulsó. El árbitro se dio cuenta del error que había cometido cuando el partido ya estaba en el descanso y expulsó al central. Lo intentó el tenerife pero no tuvo suerte y el Alavés aguantó el chaparrón.
Tras el partido, Guillem Martí atendió a la prensa donde admitió que terminó "muy cansando. Hacía tiempo que no jugaban 90 minutos y el calor me han pasado factura". El de Mercadal, que aseguró que nunca había vivido un caso como el de la expulsión, admitió que tiene contrato "y me gustaría seguir aquí. No conozco la Segunda A y me hace ilusión". El club se reunirá con los jugadores esta semana.