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Tita Llorens, de Formentera a Eivissa por los más pequeños

Realiza la travesía en menos de seis horas para recaudar fondos para niños hospitalizados

Llorens llega a la orilla | Daniel Espinosa

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«Ha sido un reto solidario muy emocionante. He pensando mucho en los niños porque cuando haces una travesía de este tipo, la haces porque quieres y sufres porque te gusta. Pero ellos no. Ellos no tienen más remedio». Eran palabras de Tita Llorens nada más cruzar a nado los 17 kilómetros que separan Formentera de Eivissa.

La deportista menorquina se lanzó a esta ventura por una causa solidaria y de mano de Proyecto Juntos. La idea es recoger fondos para esta ONG que trabaja con los niños hospitalizados. En este caso, en concreto, está dedicado a una niña de 3 años, Leyre, que permaneció hospitalizada los primeros años de su vida.

La ciutadellenca partió desde Formentera un poco después de las 08.00 horas y se enfrentó al viento y las medusas para llegar a la playa de ses Salines, frente a Beso Beach Ibiza. Llorens empleó un tiempo de cinco horas, 52 minutos y once segundos. La menorquina está acostumbrada a hacer distancias más largas por lo que se mostró bastante entera cuando llegó a la orilla entre un gran número de aplausos de los suyos y de los curiosos que se acercaron a ver que estaba pasando. En la orilla también estaba la pequeña Leyre y sus padres.

Una vez en tierra firme, la atleta de 50 años enumeró las dificultades a las que se tuvo que enfrentar: «Medusas, mucho viento, ya sabía que iba a tener durante toda la travesía el viento en contra. Cuando pasaba un barco de Balearia, muchas olas». «No ha sido más duro de lo que pensaba, porque sabía lo del viento, pero me ha costado mucho llegar. Hemos ido poco a poco», añadió.

Llorens se tuvo que enfrentar a dos bancos de medusas, uno a la salida y otro llegando ya a la playa de Ses Salines que le dejaron varias picaduras en el cuerpo.

Una vez completado este desafío, junto a su marido que la guió con el kayak, ya piensa en la siguiente travesía. Será en Italia entre Capri y Nápoles, una carrera competitiva de unos 36 kilómetros que tiene que completar en menos de 10 horas, «sino lo hago, me sacan del agua», bromeó la veterana deportista. Las personas que estén interesadas en colaborar con niños como la pequeña Leyre pueden realizar aportaciones a través de www.migranodearena.org o de www.proyectojuntos.org.

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