Carlos Alcaraz perdió (5-7, 6-4, 7-5) este domingo ante el británico Cameron Norrie la final del torneo de Río de Janeiro, de categoría ATP 500 y disputado sobre tierra, por culpa mayormente de una lesión en la pierna derecha sufrida en el segundo set con todo a favor.
El murciano creció de nuevo sobre la marcha en la cita brasileña, con un inicio complicado y con el maratón ambos de la jornada de viernes. Norrie tuvo la primera opción de romper pero Alcaraz fue mejorando al resto, rondando el 'break' hasta que se convirtió en set a favor con el 5-7.
Alcaraz, que ganó hace una semana al británico en la final de Buenos Aires, puso la directa en el segundo set pero después de poner el 3-1 empezaron las molestias en la pierna derecha. A partir de ahí y con una breve intervención del fisio, el murciano perdió cuatro juegos seguidos, frustrado por el contratiempo.
Los ocho partidos en dos semanas, los primeros de 2023 tras más de 100 días fuera con dos lesiones, pasaban factura a un Alcaraz que se mantuvo en pista pero cojo. Así, el murciano no quiso intercambios y lanzó su derecha sin miramientos. Norrie tuvo también que jugar su papeleta y forzó el tercer set (6-4).
El juego directo del murciano le dio un 'break' de inicio en el parcial final, pero de nuevo el inglés mantuvo la calma para hacer daño donde sufría Alcaraz. El campeón se aferró a la pista, andando pero con golpes de calidad, quitándose el vendaje de la pierna porque de nada parecía ayudar. En el momento clave, Norrie acertó con primeros saques y complicó más si cabe la respuesta de un Alcaraz que le daba vueltas a una nueva lesión, en la misma zona que en su baja en el Abierto de Australia. El de El Palmar, que aspiraba a igualar a Novak Djokovic en el número uno del mundo de ganar, fue destronado en Río.