La Fórmula 1 probará un sistema de refrigeración para el 'cockpit', el habitáculo dentro del monoplaza donde se sientan los pilotos, ante el temor de que estos estén expuestos a temperaturas extremas, según un informe de la web motorsport.com.
La combinación del calor con los cascos y la ropa ignífuga que deben llevar los pilotos durante dos horas el día de la carrera puede hacer que un coche de F1 resulte muy incómodo.
En el Gran Premio de Catar del año pasado, los pilotos sufrieron temperaturas de más de 30 grados centígrados y con una humedad superior al 70%.
Varios pilotos fueron llevados al centro médico para ser examinados después de la carrera. El estadounidense Logan Sargeant, de Williams, incluso tuvo que retirarse debido al calor, mientras que el francés Esteban Ocon dijo que había vomitado en su Alpine.
La FIA ha reaccionado modificando el reglamento, según informa motorsport.com, que ha tenido acceso a una notificación oficial. La introducción de ventilación en el 'cockpit' canalizará aire fresco hacia el piloto. Las pruebas se llevarán a cabo tras el parón de mitad de temporada, que comenzará después del Gran Premio de Bélgica, el 28 de julio. El Gran Premio de Países Bajos, el 25 de agosto, es un posible punto de partida.