El piloto español de Fórmula 1 Fernando Alonso (Aston Martin), que ha finalizado decimoctavo en la carrera al esprint del Gran Premio de Sao Paulo, ha asegurado que llevan ocho carreras siendo «el octavo equipo» y que continuarán siéndolo, por lo que estarán «en la cola de la parrilla» en las pruebas que restan de Mundial.
«Hemos cambiado cosas en el coche, pero positivo hay muy poco. No hemos tenido ritmo en todo el 'finde' y tampoco lo tuvimos ahora en esta 'sprint race'. Todavía nos quedan algunos cambios por hacer de cara a la crono para intentar encontrar un poco de ritmo, y mañana en carrera igual llueve, todo puede pasar. Hay que estar siempre atentos y empujar. Llevamos ocho carreras, más o menos, siendo el octavo equipo seguimos siéndolo, no va a cambiar. En las próximas tres carreras te adelanto ya que vamos a estar en la cola de la parrilla también», señaló en declaraciones a DAZN tras la carrera al esprint.
Aún así, el asturiano cree que «todo puede pasar» en Interlagos, donde siempre hay «mucha acción». «Nos falta ritmo, hay que aceptarlo, hay que resignarse. No se puede hacer un milagro de un fin de semana para otro. En México estábamos noveno o décimo equipo y cinco días después seguimos siéndolo. Hay que pensar en el año que viene, pero estas carreras que faltan intentar aprovechar cualquier oportunidad», insistió.
Además, destacó las dificultades del monoplaza en el trazado brasileño. «Cuantas más curvas haya, más nos cuesta, es donde más agarre hay. En la recta solemos ir bastante bien, es solo acelerar y mantener el volante recto. Es un momento difícil, ya llevamos ocho o nueve carreras en las que estamos en la parte trasera», subrayó.
«Ha habido pequeños milagros como los de Bakú y Singapur, que conseguimos hacer puntos, y ahora se puede poner más en perspectiva cuánto de milagro fueron aquellos resultados. De estar luchando por el podio el año pasado a estar ahora en las últimas posiciones... Hay que intentar mejorar, no se puede tirar la toalla. Mañana igual llueve, igual se presenta otra oportunidad y otro pequeño milagro», concluyó.