El «Spartan» (1913), en Época Cangreja; el «Amorita» (1935), en Época Bermudiana; el «Argos» (1964), en Clásicos; el «Mariska» (1908), en Big Boats; y el «Barlovento-Senda Azul», (1975), en Espíritu de Tradición, son los ganadores de la XXI Copa del Rey Repsol de Barcos de Época, disputada en aguas de Menorca bajo la organización del Club Marítimo de Mahón desde el pasado 27 de agosto. La competición constó finalmente de tres pruebas, tras la anulación de la primera jornada por falta de viento, y reunió a una flota de 49 embarcaciones de 11 países, con unidades que abarcan desde mediados del siglo XIX hasta finales del XX.
El momento más dramático de la semana, y por el que esta edición será recordada en el futuro, se produjo el jueves, cuando una súbita tormenta con fuerte precipitación y rachas de 53 nudos sorprendió a la flota y dejó fuera de combate a dos de los barcos más emblemáticos: el «Tuiga» (1909), completamente desarbolado, y el «Lady Anne» (1912), que sufrió la rotura del botalón y de una cruceta. En la última jornada, el anemómetro osciló entre los 6 y 12 nudos en distintos puntos de la travesía hasta la Illa de l’Aire, cuyo faro es el icono de esta regata considerada como la más importante del circuito de vela vintage del Mediterráneo.
Cinco ganadores
En Época Cangreja (barcos anteriores a 1950 con aparejo trapezoidal), el «Spartan» (1913) logró su quinto título en la Copa del Rey Repsol, tras los obtenidos en 2016, 2022, 2023 y 2024.
En Época Bermudiana (barcos anteriores a 1950 con aparejo triangular), el triunfo fue para el «Amorita» (1935). Se trata de su primera victoria en la Copa del Rey Repsol, y la verdad es que la obtuvo con una inesperada autoridad (con dos primeros y un segundo), relegando al segundo puesto al «Santana» (1930).
La historia en la clase de barcos Clásicos (desde 1950 hasta 1975) estaba prácticamente escrita de antemano. Hace siete ediciones que ninguna embarcación consigue inquietar al «Argos» (1964), que con sus diez victorias en la Copa del Rey Repsol ya puede empezar a soñar con superar la marca de 14 títulos del «Calima», la unidad más laureada de la historia de la regata.
La competición de Big Boats se vio inevitablemente desvirtuada tras la retirada del «Tuiga» y del «Lady Anne» después de la segunda jornada. Este último partía como gran favorito, tras su victoria del año pasado. El «Mariska» (1908), que confiaba en medirse con sus gemelos, se quedó solo, dado que el «Cariad» (1896), su único rival en liza, es una embarcación mucho más lenta y con una configuración (la de queche áurico) que no le permite plantar batalla.
La lucha más intensa se vivió en Espíritu de Tradición (barcos clásicos modificados con materiales modernos o de nueva construcción con líneas antiguas), donde el «Barlovento-Senda Azul» (1975), de Domingo de Torres y que contó para la ocasión con el regatista local Fernando Rita, se adjudicó el triunfo en la última manga y recuperó el liderato que perdió tras pinchar con un cuarto puesto en la jornada del viernes. La victoria estuvo en juego hasta el último bordo y se decidió por un punto.