La selección española femenina de rugby, con la mallorquina Zahía Pérez en sus filas, ha perdido este domingo en Northampton (Inglaterra) contra Irlanda (43-27) su segundo partido de la Copa del Mundo, lo que la deja sin opciones de jugar los cuartos de final, a falta de su duelo contra Japón en el cierre de la fase de grupos.
España, que jugó de igual a contra el quinto equipo de la clasificación mundial durante más de media hora, sumó su primer punto en el torneo gracias a los cinco ensayos plantados, que valen una bonificación ofensiva.
Un error de la balear Zahía Pérez, confundida por un mal bote del oval, facilitó que Irlanda se adelantase pronto mediante la apertura Danna O'Obrien, que poco después resolvió una larga acción de ataque de su equipo con un pase para Amee-Leigh Costigan, que corrió hasta la esquina para poner el 12-0.
La doble desventaja picó en su orgullo a las españolas, quienes acamparon durante el siguiente cuarto de hora en el campo irlandés gracias a una tremenda presión sobre las rivales, impotentes para contrarrestar las pescas en zona de placaje y para detener las acometidas de las delanteras.
Marieta Román, tras una combinación en 'touche' a cinco metros, y Claudia Pérez, que recogió en su pasillo un pase extraordinario de Amalia Argudo tras una serie de impactos del paquete español, equilibraron el marcador (12-12) con dos ensayos de excelente factura.
El encuentro se desequilibró en los cinco últimos minutos de la primera parte, a raíz de una 'touche' mal lanzada por Cliodhna Moloney a las manos de Ana Peralta, que no se esperaba el regalo y cometió un 'avant' a cinco metros de la propia línea de marca.
Las balas del 'seven' irlandés, jugadoras que han logrado títulos en las Series Mundiales de la modalidad olímpica, no perdonaron a España en esos instantes de desconcierto y estiraron el marcador antes del descanso con dos ensayos casi consecutivos de Eve Hinggins y Anna McGann.
La segunda mitad, en la que el desgaste mermó el ritmo del encuentro y ninguno de los dos equipos lograba circular en defensa para incomodar a las rivales, fue un recital ofensivos con tres ensayos por bando en el que España anotó mediante Claudia Peña, Mireia de Andrés y Cristina Blanco, que posó tras un precioso tuya-mía con Bingbing Vergara a la salida de un saque de lateral.