El tenis ha sido bastante cruel con el prometedor tenista de Maó, Felipe Virgili, este último año. Cuando debería haber estado en su pico físico y de juego una importante e inoportuna lesión ha sido una compañía demasiado pesada que ha hecho temer incluso por este cierre de temporada 2025. Desde el primer momento en que su hombro empezó a darle problemas hace ya cerca de cuatro meses, Virgili ha podido ser el mismo jugador, a causa de una grave luxación de hombro que se le diagnosticó a comienzos de julio en Alomar Centres Mèdics.
El tenista mahonés ha estado tres largos meses en el dique seco y alejado de las pistas de tenis, hasta que este pasado fin de semana Virgili ha vuelto a sentirse jugador de tenis y con muy buena nota y sensaciones en su vuelta a la competición. Las lesiones constituyen el mayor contratiempo que todo deportista puede hallar en su camino y al fin el menorquín ha visto la luz definitiva al final del túnel. Tras ocho días entrenándose de nuevo, ha empezado a jugar con su equipo, el CT Mario Stasi Lecce de la potente Serie A de Italia, viéndose contra la potente Roma y siendo determinante.
Palabras de efusividad
«Me sentí muy contento porque estuve de vuelta y con apenas una semana de entrenamiento con normalidad, por lo que lo más normal habría sido perder y no», exclamaba Virgili, que en su vuelta a la competición se impuso a Teo Masera, del TC Parioli, por un claro 6-3 y 6-0 y mostrándose a un gran nivel, «ante un equipo favorito y muy fuerte. Tenía ya muchas ganas de jugar, de competir, de aquello de cuando compites y se te remueve la barriga», señalaba emocionado y en tierras italianas, Virgili, para este diario.
Muy consiente el mahonés que en su regreso, tras más de tres meses de inactividad, «no podía jugármela a tener que parar otros meses por el hombro», Virgili señala que se encontró muy bien de la lesión. «Por suerte no me dolió, ni molestias, al fin», exclamaba, mientras nos avanza que, de aquí a finales de temporada, jugará la liga italiana por equipos con el CT Mario Stasi Lecce, que acaba a mediados de noviembre y para lo que se le fichó.
Muy feliz de, pese a ser por una lesión, haber pasado mucho tiempo en Menorca con la familia, Virgili nos avanza que luego intentará jugar los torneos clasificatorios de individuales y de dobles para el Foro Itálico 2025 de los internacionales de Roma. Ya en enero llegará la pretemporada para posteriormente buscar algún punto ATP– antes de la lesión ya había sumado tres–, y, aparte, «sueño con repetir experiencia en casa, porque no hay nada como jugar donde has crecido y ante tu gente».