Cinco de cinco, o lo que es lo mismo, el Valeriano sigue en lo más alto y se perfila como el principal candidato al título. Ante un Jamper competitivo y aguerrido, supo tirar adelante un partido (3-0), que tuvo el hándicap de la lesión de Helia González que no pudo participar en los dos últimos sets.
Tras dos meses sin competir en su pista, y con el trasfondo de los últimos acontecimientos, el Valeriano saltó a la pista con el equipo de gala. A priori, el Aguere, no tenía que ser aquel rival que conquistó el título de liga hace dos campañas en el Pavelló. Pero en los comienzos se mostró fuerte, decidido, y compitió de poder a poder, con un Valeriano, errático y despistado, al que le faltaba convicción en sus jugadas.
Tras llegarse a mediados del primer set con empate a 11, el Valeriano pegó un pequeño tirón (15-12) que obligó al técnico visitante a parar el encuentro. Rivero mantenía con sus remates al Jamper en el partido, ayudado por los errores en el servicio del Valeriano, mientras que Liz era la que decidía por parte local, ayudada por los bloqueos de Correa-Sandell.
En el último tramo, la gran defensa del Valeriano (con lesión incluida de Helia), dejaba en franquicia el primer set (23-16), pero con servicio de Rivero el Jamper logró 6 puntos de forma consecutiva que metieron el miedo en el cuerpo. Al final se pudo respirar tranquilo y el set se quedó en casa.
Sin el concurso de Helia en el segundo set, con su tobillo dolorido, sus compañeras salieron con decisión y tomaron la delantera. Pero los 2-3 puntos de margen no garantizaban un set placentero.
Así, el Jamper se colocó a un solo punto antes de entrar en el tramo decisivo. Ahí emergió la figura de Carla Días, que con sus remates por el centro, un bloqueo junto a Correa, y un último servicio que tocó la red y despistó a las jugadoras canarias. El segundo también cayó del lado local (25-19).
Los primeros compases del tercer set, no distaron mucho de los dos anteriores. Ventajas mínimas del Valeriano, para ir incrementándose a medida que transcurría éste. Bien Correa en el remate, una corta de Sandell, y los errores del Jamper en el servicio, que hacían el resto.
Con 23-20, saltó a la pista la única que faltaba por jugar, la colocadora Cristina Sanz, y fue suyo el último punto del set y del partido, con una soberbio remate a segundo toque que sorprendió al conjunto canario y a un publico que le regaló una gran ovación, para animar a unas jugadoras que necesitan el apoyo de sus aficionados, en unas semanas que se esperan complicadas.