Ni en la premonición más negativa se podía llegar a pensar en ver el encuentro que ofreció ayer por la noche el Valeriano Allès Menorca en su Pavelló Municipal ante el CV Barcelona. El conjunto que dirige Bep Llorens ofreció de largo probablemente el peor encuentro desde que el ciutadellenc dirige la banqueta bermellón y acabó claudicando ante un Barça superior en el día de ayer y que acabó paseándose en el último set y con las jugadoras de banqueta. De esta manera Bep Llorens y las suyas no pudieron salirse con la suya de ganar a un rival directo como el catalán y de paso brindar la primera alegría a su incondicional parroquia.
Y eso que amanecieron muy bien las cosas para las menorquinas, que rápidamente se colocaron 8-4, mandando en la pista y siendo superiores en la red gracias inicialmente a Rese McNatt e Irene Cano. Empezaba bien el partido con bloqueo de las dos jugadoras foráneas (6-2) ante un Barça con dudas de inicio y que se veía superado en la red, viviendo tan sólo del error local. Un gran remate de Marquès llevaba al primer tiempo técnico (8-4).
Se las prometían felices en el Valeriano Allès, pero poco a poco el Barça se iba haciendo fuerte desde la defensa, empezando a levantar todos los balones y dejando claro a las menorquinas que no sería tarea fácil. 16-15 en el segundo tiempo técnico, hasta llegar al 18-16 local;momento en el que las menorquinas gozaron de varias ocasiones para rematar la faena y no lo hicieron. Un Barça comandado por Segura y Nerea Sánchez se creció y se hizo suyo el primer set (22-25) ante la incredulidad del respetable.
Ya la segunda contienda amaneció con el guión del último tramo del primer set. El equipo de Marta Gens estaba crecido desde la retaguardia y al Valeriano Allès -que echó en falta la aportación de jugadoras como Do Monte y Cano- se le atragantaba la ofensiva. Una gran Sánchez situaba un inquietante 6-9 en el electrónico y el miedo empezaba a planear en el Pavelló Municipal. Al equipo de Llorens le costaba levantar balones y en ataque, tan sólo destellos puntuales de McNatt o Do Monte mantenían las constantes vitales. Pero ahí estaba la visitante Sánchez, bien secundada por Espadalé, para poner el 9-16 en el segundo tiempo técnico.
Poco variaría la dinámica de aquí al final y el Barça, muy compacto y bien ordenado, se iba en el marcador de manera definitiva con un 14-21 y hasta el definitivo 17-25 que suponía el 0-2 y un jarro de agua fría para las locales, con un Bep Llorens que no terminaba de creerse lo que veía en el encuentro que debía ser el de despegar.
Set final para olvidar
Al final, el primer set, prácticamente sobró. Las bermellones ya estaban totalmente fuera de partido y el Barça jugaba a sus anchas, por lo que en seguida ya echaron tierra de por medio con un claro 2-8, que fue incrementando hasta el 8-16.
Por momentos el Valeriano Allès, el peor probablemente en mucho tiempo, hacía aguas y Marta Gens quiso aprovechar incluso para dar minutos a sus menos habituales. Al final, 12-25 y un 0-3 que debe invitar a la reflexión en el seno del Valeriano Allès.