Los nervios y la presión jugaron ayer una mala pasada al Valeriano Allès, que pese a su situación extrema de tener que ganar sí o sí, gozó de una pelota de 3-1 con 24-23 a favor y que finalmente no supieron aprovechar las de Llorens. El 2-3 final en el Pavelló, unido al punto conseguido por el IBSA en Murillo (3-2), dejaba a las ciutadellenques fuera de los Play off por el título. Y en una última jornada de liga no apta para cardíacos dada la máxima igualdad, nota predominante a lo largo de toda la temporada. Faltó suerte, algo de fortuna ayer para que el encuentro se decantara del lado bermellón, que le bastaba con ganar para estar en Play off. Pero esta le fue esquiva al Valeriano, incluso en el servicio; y eso que las cosas empezaban muy bien, con buenas sensaciones en el primer set (25-16). Las locales jugaban sueltas y a placer, muy enchufadas en el partido y con una gran Raquel Brun. Enfrente estaba un Vall d'Hebrón que parecía que la guerra no iba con él.
Fue un espejismo porque Hugo Cardozo inyectó moral y garra a las suyas para reactivarse y ponerse 1-1 (22-25), con Caro y Albesa de estiletes en la red y un Valeriano con los miedos de la primera vuelta. En la tercera manga volvía el mejor equipo local (16-11), con Brun y Cano duras en la red, pero al final se sufría (17-16) para acabar 25-19 con servicio fuera de Albesa. Pintaban bien las cosas con el 2-1. Llorens daba entrada a D'Amaro por Ester y se entraba en un toma y daca constante hasta el 20-20, con protagonismo de la brasileña. Con 24-23 y punto de Play off, al final Vall d'Hebrón empataba 2-2 y se hacía el silencio en el Pavelló (25-27).
En el decisivo set ya sabía el Valeriano que le bastaba con ganar para estar en Play off. Pero no era su día, y el rival, sin jugarse nada, estaba crecido en la red. Del 1-3 se pasaba al 6-4 de Brun. Igualdad máxima en el quinto set hasta el fatal desenlace (13-15). Tristeza en el Pavelló.