Sentía la obligación y la necesidad de ganar el Avarca de Menorca en la pista del colista Barça CVB, tras sus dos derrotas ante Gran Canaria y Tenerife. Y las de Bep Llorens cumplieron con los pronósticos, imponiéndose en La Marina (0-3).
La contienda arrancó en la Ciudad Condal con un Avarca muy enchufado (1-4), con Carla Jiménez al servicio. Las menorquinas fueron creciendo en la red y desde las puntas, maniatando a las catalanas, con la mexicana Grecia Castro de estilete junto a Jiménez. El 13-20 en el marcador puso de cara este primer set para las bermellonas, que se mostraron superiores en la red, a pesar de los intentos catalanes, que sufrieron para defender con fluidez. Las centrales del Avarca se mostraron letales e incisivas con el ya determinante 14-22. Al final, primer set menorquín 15-25, con el Avarca bloqueando muy bien y con un juego sin fisuras, y con Marina Saucedo y Zoí entrando para completar la faena.
El segundo set empezó algo más nivelado que el primero, y las barcelonesas tiraron de orgullo para intentar igualarse, al menos en juego, a las de Bep Llorens, como mostró el 7-7 en el arranque. El Avarca se mostró más errático en este set y dio alas al Barça, llegando al 10-10, en un mano a mano, Borràs-Jimena. Un saque directo de la opuesta del Avarca fue el 11-14, pero las locales volvieron a empatar a 15. El Avarca se atascó en la pista, y un Barça liderado por Borràs se fue hasta un inquietante 21-16, lo que obligó a Llorens a pedir tiempo. Tocaba reacción en cadena y automática, y con Ivone y Jimena de nuevo en pista tras estar sentadas en el doble cambio, una gran Fortuna —siempre a punto en los momentos delicados— lideró la remontada hasta el 21-23 en un monólogo suyo, completado por una gran Grecia Castro para el 22-25 y el 0-2.
Saber estar en la pista
Las menorquinas lograron lo más difícil, que fue mantener el empuje y la ilusión de las locales en el segundo acto, en el que Castro, Jimena y compañía tuvieron que emplearse a fondo. Y tras este 0-2 en el electrónico, las bermellonas no querían más sobresaltos pese a la oposición en el segundo set de un Barça guiado por una gran Borràs —con 12 puntos hasta el momento—, y lideradas por un obús llamado Jimena se marcharon ya casi de manera insalvable en el marcador (1-7). El Barça parecía estar noqueado tras ver sangre en el segundo set, y el Avarca, con cinco puntos de la opuesta gallega, se fue ya hasta el 1-9. Encima, Jiménez siguió de dulce en el servicio para las insulares.
Llorens dio entrada a Zoí por Castro viendo que el partido se ponía ya totalmente de cara, y el 1-11 era la viva imagen de la superioridad visitante. Las azulgrana parecían un muñeco en manos del cuadro ciutadellenc, que quería cerrar la contienda e irse a casa, lo que llevó al técnico azulgrana a pedir tiempo y rotar con Busquets y Gonzalo. El Barça reaccionó tímidamente (4-13).
Se nivelaron ligeramente las cosas en La Marina, mientras Llorens movía el banquillo, dando entrada también a Margó Ribot con el 8-15 a su favor. Jiménez estaba completando un gran encuentro ante sus paisanas para el 8-16 insular. Vilaseca dio vida a las locales en su empeño por alargar el set con el 11-18, pero de nuevo Jimena paró el ímpetu de las locales. La manga se igualó de fuerzas con Llorens variando a las suyas, y de nuevo Vilaseca instaló el 15-21, aunque parecía que la situación estaba controlada.
Zoí puso el 15-22 asumiendo galones y aprovechando sus minutos en pista, en detrimento de Castro, que ya había hecho sus deberes. Benítez siguió dando los últimos coletazos para el Barça con el 18-22 y su particular mini racha personal. Fortuna mostró su calidad, y un error local selló el 18-25 y el 0-3, en parte, previsible.