Este primer Fòrum del Llatzeret ha puesto de manifiesto que es posible, y necesario, el diálogo para el pacto entre las dos Menorcas.
Desde «Es Diari MENORCA», con la colaboración del Foment del Turisme de Menorca, hemos abierto este espacio de análisis y debate para alcanzar acuerdos en torno a grandes cuestiones sin resolver que suscitan controversia hace demasiados años. El modelo territorial, la carretera y otras infraestructuras públicas, limitaciones, sostenibilidad y crecimiento en la única isla de Balears que ha sido declarada Reserva de Biosfera y Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco.
Acertó Miquel Àngel Casasnovas, el nuevo presidente del Cercle d’Economia de Menorca -mirada con luces largas hacia la Isla del 2050 y el retrovisor puesto en la historia y los ciclos económicos- al propugnar la fórmula para la excelencia: crecer sin perder cohesión social y sin dañar el territorio ni los recursos naturales.
La fragilidad de nuestra región insular con recursos limitados no ha de impedir un conjunto de actividades económicas -el turismo también es industria- respetuosas con este entorno del que nos sentimos tan orgullosos. El foro evidenció que la teoría ya la conocemos -los expertos aportaron datos de gran valor para la prospección-, pero es el momento de pasar a la práctica. Un reto que nos interpela a todos, no únicamente a las instituciones. Agentes sociales -no solo empresarios y sindicatos-, entidades y asociaciones han de participar.
En el Foro Illa del Rei 2017, cuando ya denunciamos el laberinto-bucle infinito por las redundantes trabas de las administraciones a la Menorca emprendedora, el sociólogo Gonzalo Adán, director del Instituto Balear de Estudios Sociales y Sociométrica presentó un catálogo de recomendaciones prácticas que mantiene hoy, ocho años después, vigencia plena. El profesor Adán aconsejó abandonar el dinero rápido y descontrolado que da el turismo de masas; ordenar, controlar y disminuir el alquiler vacacional y los hoteles de tres estrellas a favor de más calidad como camino más lento pero mucho más satisfactorio; e impulsar la implantación de la mejor Formación Profesional de España en materias como el turismo sostenible.
Queda mucho por hacer para que no digan de nosotros, los menorquines: sou pocs i mal avinguts, porque es mucho más lo que nos une que aquello que nos separa.