Más allá de su evidente valor artístico y cultural, la exposición de Joan Miró, inaugurada el pasado martes, sigue siendo noticia en Menorca, pero por motivos diferentes. Según han confirmado fuentes del Ayuntamiento de Ciutadella, responsable de la sala El Roser, donde se exhibe la muestra «La llum de la nit», y el Institut d'Estudis Baleàrics, promotor de la exposición, una de las piezas que tenía que ser exhibida, el lienzo titulado «Tête, Oiseau» sufrió un desperfecto el pasado lunes durante el montaje de la colección artística.
Ambas fuentes reconocieron que mientras la brigada municipal trabajaba en los últimos retoques de iluminación antes de presentar la muestra a la prensa, la caída de una escalera provocó una marca de diez centímetros y una rotura de un centímetro en el lienzo. Joan Punyet Miró, quien se había desplazado hasta la Isla para participar en la presentación, ha restado importancia al incidente afirmando que se trata de un desperfecto «fácilmente reparable».
En esa misma línea se manifestó también el comisario de la muestra, Enric Juncosa, quien añadió que el rasguño es «totalmente recuperable» y que en ningún caso se trata de «un daño irreparable».
El cuadro está pendiente de ser evaluado por un perito de la compañía aseguradora, por lo que su reincorporación a la muestra durante su estancia en Menorca no será posible, ha indicado Juncosa, quien calcula que podrá exhibirse en un plazo aproximado de dos meses, cuando la exposición se estrene en la Fundació Pilar i Joan Miró de Mallorca.
Según las estimaciones iniciales del comisario de la exposición, el coste de la reparación del lienzo, que cubrirá la aseguradora, podría ascender aproximadamente a unos 3.000 euros. Por otra parte, cabe señalar que la póliza contratada para velar por las 39 piezas que actualmente se exhiben en El Roser cubre hasta 30 millones de euros.
Todo arte tiene un valor, sea el que sea, si no fuese así no lo llamarían arte, que a unos le gusto y a otros no, va en función de gustos y del cristal por el que miras, para gustos los colores, y Miró entendía mucho de eso, con el arte no sólo se pretende gustar, también se pretende sorprender, asustar, avergonzar, enamorar, alegrar, odiar...etc. Lo que me parece increible es que no se tomen la medidas de seguridad oportunas para montar una exposición como esta... Dicen que nadie pierde con este accidente, que para eso hay unos seguros, pues no es así, el valor de este cuandro a bajado miles de euros, probablemente mucho más, y el dueño/s esten muy cabreados por ellos.