Balears acaba de ver nacer una nueva compañía teatral, La Xorca, un proyecto que cuenta con participación menorquina, la del actor Josep Orfila, junto a otros cinco licenciados de la Escola Superior d'Art Dramàtic de les Illes Balears (ESADIB), casi todos de la promoción de 2013. «La Xorca es fruto del entusiasmo y la ambición de hacer teatro en tiempos difíciles», asegura la compañía en su carta de presentación, de la que también son partícipes las mallorquinas Lucía Sánchez, Sara Sánchez, Lluki Portas, y Neus Cortès, además del valenciano Martí Henarejos.
«Lo que estamos haciendo obedece a la situación real que nos encontramos al salir de la escuela», explica el menorquín, quien añade que se han visto obligados «a partir de cero, pero con un proyecto de vida e ilusión». Durante el último mes y medio han estado ensayando en un garaje de Maó a las órdenes del menorquín Pitus Fernández para poner en pie el montaje «Klígula», una adaptación del «Calígula» de Albert Camus, que se representará los días 11 y 12 de octubre en la Sala Multifuncional de Es Mercadal, escenario que han elegido para debutar.
Los actores llamaron a la puerta de Fernández, quien había sido su profesor en la ESADIB, para invitarle a participar, y éste consciente de «la situación que vive el oficio» no se lo pensó dos veces. El director se ha puesto así al frente de la primera apuesta escénica de La Xorca, cuyos integrantes declaran creer ciegamente «en la figura del actor como creador de recursos y herramienta principal del proceso teatral», sostienen en su declaración de intenciones. En la misma hacen referencia también a la energía imaginativa de una compañía joven «con el motor recién encendido» con el propósito de ofrecer «una nueva cara al actual panorama teatral».