El pasado fin de semana se celebró una nueva edición del Festival de Artes de Calle de Salamanca, una cita en la que participaron una decena de compañías y que se encargó de clausurar la agrupación teatral Tutatis con el espectáculo «Cavalls de Menorca», un montaje teatral que nació hace cuatro años y medio y que tal y como señala su responsable, Lluís Rovira Yaguez, desde entonces ha viajado promocionando la identidad festiva de la Isla por medio mundo.
La lista de lugares por los que han 'cabalgado' los cuatro caballos, en forma de marionetas mecánicas, es interminable, e incluso la qualcada ha cruzado el charco para exhibirse en Costa Rica, Canadá y México. En Europa, siempre en formato de «adaptación teatral», destaca Rovira, se ha paseado, entre muchos otros países, por Rumanía, Escocia, Inglaterra, Bélgica y Holanda. El listado de provincias españolas por las que la compañía Tutatis ha exhibido el poderío del caballo menorquín es amplia, pero «curiosamente», apunta su promotor, nunca han actuado en Menorca. «Siempre he sentido curiosidad por saber qué pensarían en la Isla de este espectáculo», sobre el que insiste que hay que tener muy en cuenta que «no pretende nada más que hacer teatro».
Rovira, catalán de nacimiento, confiesa sentirse también muy menorquín. De hecho su relación con la Isla se remonta a muchos años atrás, cuando la recorrió «como mochilero» en una época en la que «apenas había hoteles». Y fue en el viaje de vuelta de una de sus muchas visitas, cuando sentado en la butaca de un barco rápido con destino a Barcelona se le ocurrió, recuerda, la idea de «Cavalls de Menorca».
A mi me parece que se tendrían que dedicar a bailar con la barretina catalana y a hacer castellets. Que dejen Menorca tranquila y que se independicen. No necesitamos que Cataluña nos promocione nada. Yo les aconsejo una representación sobre los Pujol, a ver que tal les sale.