«De la importancia y trascendencia de Josep Maria Quadrado en la historiografía española del siglo XIX puede haber pocas dudas». Con esas palabras iniciaba este sábado el decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universitat de les Illes Balears (UIB), Miquel Deyà, su intervención en la asamblea de la Confederación Española de Centros de Estudios Locales (Cecel), que se está celebrando este fin de semana en Ávila.
De esta forma, la figura del conocido polígrafo menorquín (Ciutadella, 1819) está tomando relevancia más allá de las Islas en el año en que se está conmemorando el 200 aniversario de su nacimiento. No se puede olvidar, tal y como recordó el conferenciante, que el actual Cecel depende del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), entidad que hasta 1978 contaba con un patronato que llevaba el nombre de Josep Maria Quadrado.
Deyá reconoció que el acto celebrado en Ávila es del parangón, por su relevancia, del homenaje realizado en 1919 en la sede de la Real Academia, con la presencia del Rey Alfonso XIII y el presidente del gobierno Maura, con motivo del homenaje en el primer centenario del nacimiento de Quadrado «por lo que significa este reconocimiento a su figura en un ámbito nacional».