La alcaldesa de Ciutadella, Joana Gomila, ha firmado la aceptación legal del legado testamentario de la biblioteca de Antoni Pico Vivó (Ciutadella, 1944-2011).Así se pone fin a un largo proceso, que se ha prolongado durante cerca de 11 años, cumpliendo «con las últimas voluntades del bibliófilo de Ciutadella», señalan desde el Consistorio.
El origen del problema fue que en su primer testamento Picó Vivó hablaba de la donación de su biblioteca al Ayuntamiento, pero cambió sus deseos el día antes de su muerte refiriéndose a ese patrimonio como una entrega para su custodia y consulta.
Razón esa por la que desde la Administración se fue precavido a la hora de aceptar un legado e invertir en su catalogación y custodia ante la posibilidad de que ese patrimonio pudiera ser reclamado.
El concejal de Cultura, Andreu Cardona, confirmaba ayer que se trata de un asunto zanjado, ya que tras las consultas pertinentes con los servicios jurídicos ha quedado claro que trata de «una donación» y que los documentos son ahora de titularidad municipal. El gerente del área de Cultura,Josep Marqués, añade que «se ha tenido que hacer una interpretación del testamento hológrafo que no era exactamente igual que el testamento escrito anterior».
Para la recepción se ha tenido que hacer un inventario exhaustivo del fondo, una labor en la que ha colaborado el historiador Joan Pons Alzina. Actualmente los 3.024 títulos heredados ya están colocados en las estanterías del Arxiu Històric Municipal. Recientemente, la bibliotecaria Maite Pons ha iniciado los trabajos de catalogación. El archivero municipal, Florenci Sastre, sostiene que la incorporación de los nuevos fondos representa «un conjunto muy apreciable».Aunque parte de los títulos ya están disponibles en el archivo, «existen algunos excepcionales que no se pueden encontrar en ninguna otra biblioteca pública de Menorca», señalan desde el Consistorio, aunque por el momento no se han detallado cuáles.