Al final no llovió, pero los organizadores del Pícnic Vega Jazz se muestran muy satisfechos con la decisión adoptada de trasladar la tradicional cita que se celebra al aire libre, en el Palmeral de Cala en Blanes, al refugio del Teatre del Casino 17 de Gener. Una opción a la que se recurrió para no tener que suspender una celebración que era muy ansiada, pero que pasada la pandemia tendrá que seguir esperando para volver a su formato original.
Y es que estamos hablando del evento que más público suele reunir dentro de la programación del Menorca Jazz Festival, con varias ediciones en las que se sobrepasó el millar de asistentes. En la cita del sábado, el Casino también se llenó, pero obviamente sin llegar a esos niveles. Desde la organización destacan «la buena respuesta del público» y el gran nivel de las actuaciones en el marco de un evento en el que la animación fue creciendo a medida que avanzaba la fiesta.
Es el ‘Vega Jazz' un minifestival en el que no suele faltar espacio para el lucimiento de los músicos locales, y en esta edición no fue diferente. En representación de la Isla se subieron al escenario el cuarteto liderado por la voz de Shanti Gordi, acompañado por Lluís Gener (bajo), Pere Arguimbau (guitarra) y Guillem Pons. La cuota insular se complementó con la participación de Menorca Sona BB, una big band que se fundó el verano pasado en un taller de la Escola Municipal de Música de Ciutadella.
Cerraron el evento el grupo de Isis ‘Apache' Montero y la Jinx Jazz Band con su toque dixieland. Cualquier otro año este hubiera sido el broche al festival, pero la edición actual es especial por celebrarse el 25 aniversario. Y es por esa razón que habrá un concierto de despedida, el 20 de julio en Líthica, con una estrella como Avishai Cohen con «Iroko».