El menorquín Cristòfol Pons ha sido uno de los artistas elegidos por el Institut d'Estudis Baleàrics (IEB) para participar en el Drawing Room Lisboa, una de las ferias dedicadas al dibujo contemporáneo más importantes de Europa. Una cita que se clausura este domingo y en la que el creador de Ciutadella está presente con un proyecto que lleva por título «Brecha» y bebe directamente de su anterior colección, bautizada en su día como «Es esa radicalidad la que agita mi espíritu e impide la indiferencia».
El artista continúa ahondando en el proceso creativo con el objetivo de plantear ante el espectador una reflexión crítica sobre las macroestructuras de poder. A la feria portuguesa ha acudido con un fanzine editado por Cobalto y dos trípticos que reproducen representaciones de las sedes del Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio. Trabajos para los que se sirve de los tres colores primarios con el objetivo de profundizar «en la violencia sistémica y estructural del capitalismo». De ahí que recurra a tonos tan llamativos como el amarillo, el rojo y el azul «para buscar el impacto visual».
Pons da así un paso más en el proyecto de «investigación y divulgación» que tiene entre manos sobre las políticas de esas tres entidades a las que hace referencia para representar «cómo afectan a los territorios donde actúan, qué repercusiones tienen en la población o en el medio ambiente y demostrar esas políticas fraudulentas», explica el artista.
El Drawing Room Lisboa ha reservado este año un lugar especial para Balears dentro de su sección «Foco».Además de Pons, también están presentes en la capital lusa otros tres artistas del Archpiélago: Catalina Julve, Andreu Maimó e Isabel Servera. La selección de los participantes se realizó a través de un proceso de convocatoria abierta. La presencia balear se ve reforzada, además, con la elección por parte de la organización de la feria de un dibujo de Albert Pinya como cartel oficial.