Han pasado ya 15 años desde que la Societat Històrico Arqueològica Martí i Bella puso en marcha el Grup d’Intervenció sobre Béns Etnològics, más popularmente conocido como el proyecto Gibet. Una iniciativa, sostenida a través del voluntariado, que desde entonces ha actuado para salvar aquellos bienes que se encuentran en peligro de destrucción o deterioro. A modo de resumen, la presidenta de la ‘Martí i Bella’, Carmela Sánchez, y su antecesor en el cargo, Ángel Roca, reconocían ayer que «poco a poco se han ido cumpliendo objetivos, estamos satisfechos».
El comentario lo hicieron, ante una treintena de voluntarios, en el Cercle Artístic de Ciutadella, donde se reunieron para pasar revista a los logros conseguidos durante la pasada campaña y, de paso, avanzar los objetivos previstos para la que comenzará el próximo 13 de octubre y que, domingo tras domingo, se prolongará hasta el 18 de mayo.
No cabe duda que la última fue una gran temporada, durante la que se consiguió uno de los trabajos más espectaculares desde que el programa diera sus primeros pasos en 2009. Estamos hablando de la rehabilitación de la barraca de bestiar des Comte, en el lloc de Ses Truqueries, en Ciutadella, el ejemplar de ese tipo más monumental de Menorca y, posiblemente, una de las construcciones de piedra en seco más grandes del área mediterránea.
Dicho bien se llevó los titulares, pero Gibet también realizó otras actuaciones significativas.El grupo de intervención colaboró en la restauración de otra barraca en Torrenova y Ses Truqueries, trabajo este último que actualmente está en proceso. También se actuó en construcciones similares en SonSaura Nou, con labores de desbroce, y en Torre-Saura, donde se reparó un desprendimiento de piedras.
En lo que se refiere a la campaña que está a punto de comenzar, los responsables de Gibet avanzan que en lo que resta de año se dará prioridad a la restauración y limpieza de vegetación de diferentes barracas que se encuentran en la zona de la Ronda Sur de Ciutadella. Pero la actuación estrella está llamada a ser la planificada en el talayot de Torrenova d’en Loçano. Una acción que consistirá en tarea de desbroce, pero que actualmente está pendiente de los pertinentes permisos del Consell insular.
Cabe destacar que se trata en este caso de un yacimiento que no forma parte de los elementos incluidos dentro de la candidatura de la Menorca Talayótica, pero que atesora un gran valor, al contar hasta con siete talayots. No obstante, sí que está incluido dentro del BIC del paisaje cultural de Punta Nati. Estamos hablando de un espacio que nunca antes ha sido excavado, bien conocido por los expertos en arqueología pero no tanto por parte de la población en general.
Destacan desde Gibet que con las actuaciones que llevan a cabo pretenden, además de proteger, «concienciar» sobre la necesidad de valorar y respetar el patrimonio de la Isla.
Punto de vista
Objetivo logrado: el antiguo Cementiri Civil es ya sede y almacén del proyecto
La rehabilitación del antiguo Cementiri Civil de Ciutadella fue uno de los primeros proyectos que acometió el equipo de Gibet y desde entonces han estado reivindicando que se les cediera como sede y almacén para guardar sus herramientas. Un objetivo que ha tardado pero que finalmente se ha conseguido después de que el Ayuntamiento accediera en 2023 a firmar un acuerdo temporal, una vez que se acometieron mejoras en la cubierta de la sala de autopsias. Como contrapartida, el grupo de la Martí i Bella se compromete a realizar tareas de mantenimiento, razón por la cual se actuará también durante esta campaña. Gibet cuenta actualmente con cerca de una treintena de voluntarios activos, pero como en el resto de las entidades de la Isla, muestran su preocupación por el relevo generacional.