El Teatre de Fornells recuperará protagonismo esta temporada gracias a un proyecto que tiene al vino como eje central. La promotora, Isabel Chuecos-Ruiz, se refiere a él como un museo, a sabiendas de que no se ajusta a la definición, pero considera que el espíritu del montaje es algo más que una simple exposición.
La propuesta está concebida como un espacio «inmersivo y sensorial» en el que Chuecos-Ruiz explora la historia de la malvasía, una variedad de uva que durante seis siglos «conquistó el Mediterráneo». La impulsora de la iniciativa se sirve de un lenguaje gráfico que combina mapas, esquemas y pensamientos de artistas, filósofos y poetas, para dar contenido a su ‘museo’.
La promotora cultural, que es arquitecta y sumiller, convierte de esta forma el vino en una metáfora «que conecta con personas, culturas y sentidos». Su ‘museo’ forma parte de un proyecto más amplio, Menorca Forever, que como explica es «una propuesta innovadora que fusiona arte, vino y proyecto social». Ahora, con la complicidad del Ayuntamiento de Es Mercadal, pretende animar culturalmente un «pueblo muy bonito pero en el que casi todo son restaurantes». Considera que el teatro es «un diamante en bruto» que estaba siendo infrautilizado.
Más allá de la exposición central, que está compuesta con 250 cuadros, está previsto que el espacio cultural de la villa marinera acoja diferentes actos durante el tiempo de exhibición del proyecto (31 de octubre). Tras la jornada inaugural que se celebra hoy, la poeta menorquina ConchiSalas protagonizará mañana (12 horas) la primera sesión del ciclo «Literatura & Vino». La muestra es de acceso gratuito y abre sus puertas de martes a domingo de 10 a 14 horas.
Chuecos-Ruiz ha cubierto a lo largo de su carrera diferentes etapas. Comenzó profesionalmente en el mundo de la arquitectura para después saltar al vino y posteriormente adentrarse en la escritura. «Siempre me ha interesado mucho moverme entre las intersecciones de las disciplinas», confiesa, y la muestra que acaba de abrir dentro de Menorca Forever explica de alguna forma esa filosofía de vida.
El resultado, asegura, es una experiencia multicultural que toma vida una vez que ha encontrado su lugar en el mundo, que es desde hace tiempo Menorca. «A través de una degustación performativa, el vino se convierte en columna vertebral de un relato sensorial en el que se interrelacionan geometría, color, sonido, aromas y movimiento», explica la promotora del proyecto cultural.
«Quise ver qué pasa cuando el vino se mezcla con otras disciplinas, traspasa fronteras, se enriquece y dialoga», explica. «El arte me sirve para potenciar mi discurso. Tiene que ver con la búsqueda, con encontrar lo inesperado», añade.
El concepto de museo que la arquitecta tiene en mente incentiva una participación activa que implica una interacción con los sentidos. «El vino no es un asunto solo de beber, sino de todo lo que hay alrededor, de compartir; es cultura y también territorio», afirma y Menorca, como escenario, se convierte en símbolo, dentro de un proyecto que está concebido, recuerdan desde la dirección, «como un canto al Mediterráneo como espacio de encuentro, arte y humanidad».
Un viaje de seis siglos
Lo que se puede ver en el Teatre de Fornells es una travesía sensorial y cultural que nos transporta a través del tiempo. Un viaje de seis siglos que va desde las primeras cepas de malvasía traídas por navegantes hasta los actuales viticultores que aún cultivan. «Un recorrido que revela cómo el vino ha sido testigo silencioso de guerras, exilios, celebraciones y pactos. Seis siglos de historia líquida, embotellada en aroma y paisaje», apuntan desde Menorca Forever.
quants anys fa que paga un lloguer l'ajuntament al obispat???? 20 anys!!!! que l' ajuntament compri d'una vegada es teatre de fornells!!!! que en 4 anys aquets, entesa i Pp, govern de interessos personals, no han fet res de nou, no tenen proyecte politic!!!!