Los sondeos cuestionan el segundo conseller de esta candidatura después de un mandato en el que por primera vez obtuvo representación y además ha formado parte del gobierno insular, de hecho han sido «el ingrediente que da auténtico sabor de izquierda al Ejecutivo», en expresión aproximada de su candidata Cristina Gómez. Su primer objetivo es consolidar un proyecto que irrumpió con fuerza en el electorado cuatro años atrás y que en las generales de cuatro semanas atrás ha mantenido el segundo puesto en las preferencias electorales menorquinas.
Desde el partido aseguran que uno de los motivos es la respuesta «clara y sincera» que han ofrecido para todos los asuntos debatidos en esta campaña. Ha puesto énfasis más que ningún otro en la vivienda reclamando para el Consell unas competencias que aún no tiene para poder gestionar el problema desde la cercanía. Gómez ha presumido también de «haber sido el único consell en poner en marcha procesos participativos». Ha sido ingeniosa en el debate de moda sobre las energías renovables, «el kilowatio más eficiente es el que no se consume. Antes de nada, eficiencia energética», afirmó.
En un contexto de confianza ante la jornada de este domingo, este viernes celebró en su sede de Ciutadella una fiesta de fin de campaña exclusivamente con productos menorquines con amigos y colaboradores.