Representantes del Sindicato Independiente de Enseñanza de Baleares, ANPE, visitaron Menorca para iniciar una campaña que tiene como objetivo denunciar la excesiva burocratización de las tareas de los profesores. La agrupación exige que se disminuya el volumen de este tipo de trabajos que los docentes deben realizar de forma obligatoria. Bajo el título "Menos burocracia, más docencia", el sindicato pretende llamar la atención acerca de la cantidad de informes, planes y documentos meramente estadísticos e informativos que se ven forzados a cumplimentar en todos los niveles educativos. "El tiempo que se destina a esta función debería emplearse en la calidad efectiva de la enseñanza" asegura Aina Aguiló, presidenta de ANPE Balears. Precisamente, ha sido el profesorado en general quien ha solicitado que esta campaña se lleve a cabo a nivel estatal. "No hay constancia de que este tipo de tareas burocráticas mejoren la calidad de nuestro trabajo, todo lo contrario. Apenas nos queda tiempo para preparar las clases o tener una atención más directa con el alumnado". El planteamiento que ANPE propone al Ministerio de Educación es, además de reducir la burocracia, que se dote a los centros educativos de personal administrativo que se ocupen de las tareas que no sean específicas de la labor docente. Por otro lado, el sindicato expuso el gran precio que debe pagar la Conselleria por las placas de calidad que se otorgan a los centros, "en tiempos de crisis, no creemos que sea lo más acertado. Las placas quedan muy bien, son muy bonitas pero no sirven de nada. Se ha visto claramente que conseguir ese tipo de distinción no mejora la mayoría de los aspectos" comenta la presidenta de ANPE.
Más autoridad
Otro de los aspectos que persigue este sindicato es que el profesorado recupere la autoridad. El Consell Escolar de Menorca ha percibido un aumento considerable de conductas indisciplinarias, tanto en primaria como en el resto de cursos. "Debemos reconstruir el puzzle. Con la LOGSE no han hecho más que ir poniendo parches" asegura Aguiló, quien afirma que los alumnos deben tener un límite ya que no todo es negociable. ANPE cree que debe existir autoridad docente, tanto moral, social y legal, es decir, que los atentados contra el profesor signifiquen atentados contra la autoridad pública. "Tenemos un 40 por ciento de profesores con ansiedad y un 20 por ciento con baja laboral a nivel nacional" apunta Aina Aguiló. ANPE expuso el caso de una profesora menorquina que viajó a Palma para renunciar a su cargo, según decía, por falta de vocación. Aguiló pudo explicarle que la razón por la que quería renunciar no era por falta de vocación, sino porque no dispone de las herramientas adecuadas.