El GOB ha presentado un pliego de alegaciones al Plan Insular de Carreteras con el objetivo de buscar la seguridad, hacer intervenciones precisas en el territorio y asegurarse de que las obras que se realicen sean realmente necesarias.
La entidad proteccionista propone alternativas menos impactantes para algunos casos, la supresión de determinadas actuaciones que se consideran prescindibles, e incorporar criterios de sostenibilidad de manera transversal. Como ya se ha hecho público, el GOB considera inviable el trazado de la llamada vía orbital de Maó, que afectaría de manera irreversible un importante yacimiento arqueológico en la zona de Llucmaçanes, y propone la alternativa de un vial más cercano a La Salle, que permita terminar de descongestionar la actual vía de Ronda sin afectar tanto territorio.
Tampoco se considera ajustado a la normativa vigente el trazado previsto para el enlace entre el muelle comercial y la carretera de La Mola, que afectaría una zona protegida y generaría un gran impacto paisajístico, muy visible desde la ciudad de Maó. Existe una alternativa mucho más razonable, recuperando el trazado que proponía el PTI de 2003, más adaptado a las características del terreno.
Un problema similar de afectación a terrenos protegidos presenta la variante proyectada en Mercadal. Una obra de la que el GOB discute su justificación desde el punto de vista de la carretera, y pide que se estudie más en serio la posibilidad de enterramiento. O el carril para vehículos lentos en sentido Ciutadella-Ferreries, situado tras la naveta des Tudons, que se asentaría íntegramente en Red Natura 2000, cuando ya se prevé otro carril igual y en el mismo sentido después del Plan Verde.
El GOB cree que algunas de las actuaciones previstas tal vez no serán necesarias, y que sería más adecuado hacer algunas intervenciones menores (ampliar los arcenes entre Maó y Alaior, y entre Ferreries y Ciutadella, que permitirán decantar los vehículos especialmente lentos) para ver cómo se comporta el tráfico en la carretera. Seguramente algunos de los carriles lentos previstos no serían necesarios. No hay que olvidar que en los últimos años ha bajado el número de vehículos particulares, mientras que se está incrementando mucho el nivel de usuarios de transporte público.
Precisamente en este sentido, el GOB pide que se estudien más frecuencias de transporte público ligadas al puntos que generan mayor movilidad. En este sentido, se considera imprescindible que el Plan prevea hacer el estudio de movilidad del triángulo Maó - Sant Lluis - Es Castell en la primera fase, y no a la segunda, como está planteado.
A nivel de sostenibilidad, se proponen criterios para evitar el acceso de la fauna silvestre sobre la carretera (actualmente mueren inútilmente miles de animales sobre las carreteras menorquinas) y su conducción hacia pasos seguros de cruce. También se han expuesto criterios de restitución paisajística o ajardinamiento con plantas propias del espacio, así como el uso prioritario de materiales reciclados frente a los materiales de cantera.