El titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Maó, Carlos Javier García Díez, dictó ayer un auto mediante el que accede a la práctica de todas las pruebas solicitadas por la Fiscalía y la Defensa de Mónica Juanatey, autora confesa de la muerte de su hijo César. Entre éstas destaca la realización de un examen psicológico y psiquiátrico de Juanatey, a la que el juez y el Ministerio público imputan un delito de homicidio doloso.
La práctica de estas pruebas correrá a cargo del forense y del departamento de Psquiatría del Hospital de Son Dureta, en este último caso se trata de una prueba complementaria solicitada por la defensa. Los peritos deberán determinar la anomalía mental de la acusada en el momento del crimen. Igualmente, se realizarán distintas pruebas al cadáver del pequeño para determinar los marcadores de ADN, su altura y peso.
Traslado del cuerpo
El juez Carlos Javier García Díez también autorizó ayer mismo el traslado del cuerpo de César a Noia, el municipio costero de A Coruña de donde es natural el menor, en respuesta a la petición cursada por los abuelos maternos y el padre del niño. Cabe recordar que durante el verano de 2008, antes de que César se trasladara a Menorca, tanto los abuelos como el padre se asesoraron de forma conjunta para solicitar la custodia del menor.
El cuerpo se encuentra actualmente en la Sección de Antropología de la Comisaría General de la Policía Científica de Madrid, con el fin de esclarecer las últimas dudas de la investigación y de analizar las pruebas solicitadas por las partes.
Exhortos
El titular del juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 2 de Maó, aún no ha citado a declarar al actual compañero sentimental de Mónica Juanatey, aunque igualmente ayer tramitó los exhortos correspondientes para que los abuelos y el padre del niño declaren en el Juzgado de Instrucción y Primera Instancia de Noia. Esta petición de ayuda al juzgado gallego evitará que estos testigos tengan que desplazarse a Menorca para proseguir el proceso judicial en marcha.
La defensa de Mónica Juanatey ya avanzó que apoyará su alegato exculpatorio en la eximente de trastorno mental transitorio, al entender que su cliente no era consciente de lo que hacía y actuó con su capacidad volitiva alterada.
Por su parte, la Fiscalía, aunque a priori ha calificado los hechos de homicidio doloso, castigado con una pena de 10 a 15 años, no descarta imputar a Mónica Juanatey un delito de asesinato (con penas de hasta 25 años) una vez analice los resultados de todas las pruebas solicitadas al juez.
Juanatey se encuentra desde el pasado miércoles en la prisión de mujeres de Palma.