Sólo diez restaurantes de Menorca se han adherido de momento a la iniciativa turística "Saborea España" que promociona destinos gastronómicos en el ámbito nacional e internacional.
El proyecto público-privado pretende ofrecer vivencias gastronómicas autóctonas y de calidad, y está impulsado por la Secretaría General de Turismo del Gobierno central, la Federación Española de Hostelería y Restauración (FEHR), la Organización Europea de Cocineros (Euro-Toques), la Asociación Española de Destinos para la Promoción Turística y la Asociación de Cocineros y Reposteros de España (FACYRE).
En opinión del presidente de la Asociación de Restauración de Menorca, Francisco Carrasco, ésta es una oportunidad única para promocionar los productos y los restaurantes de Menorca. Por este motivo, el Consell ha querido sumarse a esta iniciativa a través de la Asociación Española de Destinos para la Promoción del Turismo Gastronómico.
Además, en la actualidad colabora con la asociación de restauradores de Menorca elaborando la memoria de los atractivos que presentar a este selecto club; las indicaciones geográficas que existen en Menorca, su denominación de origen, las marcas de garantía, sus razas autóctonas y su oferta cultural, entre otros, según avanzó la consellera insular de Economía Antònia Allès.
Como mínimo la Isla debe presentar 25 restaurantes antes del 10 de enero para ser aceptada y los establecimientos deberán aplicar criterios de excelencia en su oferta. La candidatura menorquina se presentará junto con la asociación de restauradores de Mallorca.
El conseller insular de Turismo, Lázaro Criado, incidió en que Menorca podría disponer de un sistema de gestión para crear y promocionar producto gastronómico autóctono y los restauradores se beneficiarán de asesoramiento y formación específica para optimizar sus recursos.
"Contribuirá a mejora la competitividad y fomenta la desestacionalización", señaló. En una clara crítica a la política turística del PP, Criado subrayó que este tipo de iniciativas respaldadas por el Consell se opone a las políticas desarrollistas "indiscriminadas" de los populares. "Esta iniciativa pone de manifiesto cómo la mejora del producto favorece la desestacionalización y la generación de tejido productivo sin recurrir al desarrollismo urbanizador".