El conseller insular de Turismo Lázaro Criado mostró ayer su preocupación por el retraso que acumula la transferencia de las competencias de promoción turística al Consell de Menorca. El calendario fijado con el Govern marcaba el 1 de enero de 2011 como fecha en la que se produciría el traspaso competencial sin embargo, las recientes declaraciones de la consellera balear de Turismo, Joana Barceló, en las que advertía de que aún no hay una fecha exacta para cerrar el acuerdo, han hecho saltar las alarmas en el Consell.
Si hace unos días la consellera insular de Economía, Antònia Allès, se mostraba escéptica de lograr el traspaso antes de que finalizara la actual legislatura, Lázaro Criado, se reveló ayer reivindicativo y preocupado. Recordó que el propio Govern fijó el pasado mes de octubre como fecha límite para tener el texto consensuado y cerrado en la Comisión Mixta (Ejecutivo autonómico-consells) en materia de promoción turística, posteriormente se habló de finales de año, pero lo cierto es que a día de hoy ni siquiera hay una fecha concreta en el horizonte.
En opinión del responsable insular de Turismo, esta demora podría ralentizar el ritmo del crecimiento turístico de la Isla "Podemos perder lo logrado en el último año y podría costarnos más mantenerlo", explicó Criado, quien recordó que Menorca necesita tener la capacidad de decisión y los recursos para poner en práctica su propia promoción turística. Al respecto mencionó cómo de la mano de los convenios firmados con el IBATUR, el Consell logró dos millones de euros para promoción turística propia "con decisiones tomadas en Menorca" que ya están dando fruto como el incremento del mercado alemán, el freno de la caída del mercado británico y las nuevas conexiones con París, entre otros.
"Mientras no llegan los recursos estamos dejando de optimizar la potencialidad de Menorca", advirtió Criado. El conseller hizo hincapié en este sentido en que las decisiones que afectan a un territorio en concreto deben tomarse en ese mismo territorio y no en otro, en clara alusión a la necesidad del Consell de asumir cuanto antes las trasferencias en materia de promoción turística.