Las medidas propuestas por el Gobierno para el ahorro de energía no parecen convencer al sector insular de la venta de automóviles. Su presidente, Orestes Carreras, hacía ayer un llamamiento para que desde Madrid "se sea coherente" con la política ecológica.
"Si realmente quieren ahorrar combustible, hay que dejar a un lado la reducción de velocidad y financiar el cambio de ruedas", declaraba el representante de la patronal, quien considera, no obstante, que la verdadera solución pasa por promover un plan destinado a potenciar la renovación de los coches que sobrepasan los diez años de antigüedad. El presidente recuerda que existe la tecnología necesaria para reducir en gran medida el consumo y los gases contaminantes y hace hincapié que los coches viejos contaminan "hasta diez veces más".
PLAN
La propuesta del presidente de la asociación de concesionarios pasa por incentivar el consumo a través de eximir al cliente del pago del impuesto de matriculación. Según sus cálculos, se podrían llegar a vender con ese sistema cerca de 200.000 unidades más a nivel nacional, algo que por otra parte permitiría "que el Gobierno incrementara sus ingresos a través del IVA".
El sector del automóvil acaba de salir de una semana muy movida, después de que se rechazara en última instancia la enmienda a la Ley de Economía Sostenible, que establecía una nueva regulación para la distribución de coches según la cual los fabricantes se veían obligados a recomprar a los concesionarios los automóviles y los componentes no vendidos en 60 días. La norma, tumbada a última hora después de haber pasado ya por el Congreso y el Senado, ha supuesto un revés para el sector, ya que podía haber sido "una solución definitiva" para los problemas que vive actualmente, según Carreras.
El plante de los fabricantes creó una crisis que el Ministerio de Industria atajó hace dos días al comprometerse a redactar una nueva ley en tres meses, un texto que según Carreras tiene toda la pinta de mantener la posición de fuerza que siempre han ostentado las grandes marcas.
FERIAME
La patronal debatió dicho tema en la asamblea celebrada la pasada semana. En la misma se analizó la situación que vive el sector actualmente en la Isla y se decidió que este año se seguirá apostando por mantener Feriame. Los concesionarios confían en la veterana muestra como una posible salida de un agujero que cada vez es más hondo.