Los partidos políticos pusieron punto y final a la campaña electoral con diferentes fiestas, en las que los candidatos a las alcaldías, Consell y Parlament aprovecharon para lanzar un último discurso e invitar al público asistente a un picoteo.
De hecho, el PSM celebró su encuentro en el Bar Nou de Maó. Amenizado por la actuación del conjunto Arrels de Menorca, el evento contó con la presencia de los miembros del partido y algunos simpatizantes, que quisieron escuchar las palabras de los candidatos Maite Salord, Nel Martí y Maria Josep Morell.
Desde la agrupación aseguran haber realizado una campaña electoral basada en la proximidad, con la que "los ciudadanos se den cuenta de que el menorquinismo es la solución y que el partido quiere estar ahí para escuchar".
Uno de los miembros del PSM, Joan Carles Villalonga, aseguró esperar con ilusión los resultados de mañana ya que "en las encuestas hay que leer entre líneas y se ve que hay una posibilidad de crecer".
El PSOE, por otro lado, escogió la plaza Sant Roc para su último acto de estos quince días de campaña en Maó. Ante unas 80 personas, los candidatos Vicenç Tur, Marc Pons y Joana Barceló subieron al escenario coincidiendo en que la ciudad debe seguir siendo socialista.
"Este barrio siempre lo ha sido y es muy importante que vayáis a votar el domingo. No nos jugamos aspectos de macroeconomía si no un modelo de ciudad", dijo Tur, quien añadió que el PSOE ha basado su campaña en llegar a todas las personas. "Hemos ido puerta a puerta. Ha sido la movilización más grande que hemos hecho hasta ahora, con estrategia telefónica incluida". Marc Pons quiso recalcar que Menorca debe mantenerse como está. "Queremos lanzar ese mensaje de libertad, de sensibilidad a los que más lo necesitan. No podemos hacer todo, pero estamos ahí, cuando la cosa va bien y cuando va mal". Algo en lo que coincidió Joana Barceló, quien hizo hincapié en el compromiso con las personas y los servicios que aportan bienestar a la ciudadanía.
Poniente
Tras su paso por Maó, tanto los cabezas de lista del PSOE, Marc Pons y Joana Barceló, como los del PSM, Maite Salord y Manel Martí, se desplazaron a Ciutadella para participar en los últimos actos electorales. A Salord se la esperaba en el debate que se celebró en el Cercle Artístic, que resultó multitudinario y, paradójicamente, contraproducente para buena parte de las fiestas de final de campaña programadas en la ciudad de Poniente, que se animaron una vez acabada la contienda entre todos los alcaldables.
Poco antes de las ocho y media, ensayaban en la plaza de la Catedral, Cercadors de Sons. El dúo debía abrir la fiesta de Esquerra Unida-Esquerra de Menorca, que resultó bastante solitaria al principio, cogiendo fuerza después. A esa misma hora, en cambio, ya había ambiente en la plaza de Els Pins, donde se celebró la fiesta del PP, una fiesta amenizada por diferentes grupos musicales.
Una hora más tarde, la expectación había crecido en esa plaza y al son de Inventario se repartían chapas y banderolas y comenzaba animarse el Can Santi, punto de encuentro del PSM. Hubo que esperar a después de las 10- con el debate del Cercle finalizado- para que las fiestas lo fueran realmente. El ambientazo de la noche estaba en la del PP, los buenos pronósticos flotaban en el ambiente y la llegada de Mayor Oreja acabó de animar el cotarro.
Mucho más comedido era el ambiente entre los nacionalistas menorquines- que no ocultaban su optimismo- y los socialistas, un puñado de ellos reunidos en La Margarete escucharon las consignas de sus líderes mientras se compartían cervezas y trozos de coca- menú común en todos los partidos- mientras que en Unió Menorquina se departía al ritmo de Lady Gaga y su "Don't call my name".
No se dijo anoche nada que no se hubiese dicho anteriormente. Predominaron mensajes de autoafirmación y llamada a la movilización para afiliados y simpatizantes. Y en voz baja, el alivio porque la campaña tocaba a su fin y sus resultados se conocerían en pocas horas.
Fiestas de despedida de campaña hubo también en los distintos pueblos de la Isla como Alaior, Es Migjorn o Es Castell. Algunos candidatos se multiplicaron.