El PP ha definido ya el organigrama del Ayuntamiento de Ferreries, una vez ha conocido que ni Entesa de l'Esquerra ni el PSOE aceptan su ofrecimiento de gestionar algunas de las áreas municipales. Cabe recordar que gobernará en minoría.
Así las cosas, el alcalde Manuel Monerris será la única persona que tendrá dedicación exclusiva, lo que le servirá para asumir las tareas de gobernación, deportes y participación ciudadana. Además se encargará de coordinar el conjunto del funcionamiento de la institución.
Vicent Coll, primer teniente de alcalde, será el encargado de llevar el área de urbanismo, a lo que sumará otra área de peso como es hacienda y, ya algo más relajado, la organización de las fiestas.
Para Álejandra Marqués se han reservado las áreas de cultura, servicios sociales, mientras que José María Huguet se queda con Medio Ambiente, Educación y Juventud, y Margarita Rotger será la responsable de artesanía, ferias y mercados, y turismo.
Una oferta poco clara
La Entesa de l'Esquerra de Ferreries ha declinado el ofrecimiento del Partido Popular para hacerse cargo de algunas de las áreas del gobierno del Ayuntamiento. Según el partido de Josep Carreres, "consideramos oportuno y conveniente dar el suficiente margen de maniobra al PP para que gobierne el Ayuntamiento y el pueblo del modo que considere más adecuado, y sin condicionantes por nuestra parte".
Además, la formación de izquierdas añade que, tal como avanzó este periódico, "el PP no había especificado las áreas que estaba dispuesto a cedernos, ni las condiciones de su gestión, lo que nos transmitía poca planificación y poca claridad".
De este modo, la Entesa se coloca en la oposición del nuevo Ayuntamiento, gestionado por un PP en minoría, con cinco concejales de un total de once.
La Entesa asegura que "llevaremos a cabo una oposición ejercida con lealtad, espíritu crítico, buenas formas y en positivo, buscando el consenso y el interés general de nuestro pueblo".
La formación de izquierdas apunta que "consideramos conveniente trabajar de manera muy próxima con las entidades del pueblo y la ciudadanía en general, para recibir sus demandas y sus críticas. Ésta será una manera eficaz para interceder y actuar para el bien común, trabajando por continuar con el elevado grado de participación y de implicación en la vida social de la ciudadanía".