Los ocho ayuntamientos de Menorca ya han abonado a los trabajadores municipales la nómina correspondiente al mes de junio, y la mayoría, a excepción del Consistorio de Alaior, han hecho lo mismo con la paga extra de verano. Con mayor o menor dificultad, según la tesorería de cada uno, han hecho frente a los pagos comprometidos el mes recién finalizado.
Así, el nuevo equipo de gobierno de Sant Lluís ha tenido que solicitar una póliza de 500.000 euros para abonar las mensualidades comprometidas tanto a trabajadores como a proveedores. En Alaior esperan al inicio del período de recaudación municipal de Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para hacer caja y poder abonar los trabajadores públicos la paga extra pendiente.
En Es Castell reconocen que en mayo no se abonó la paga extra de verano por un problema puntual de tesorería, pero que se trata de un abono que en ocasiones anteriores se ha retribuido en junio, como ha sucedido este año. El nuevo equipo de gobierno reconoce tener problemas económicos "como otros muchos consistorios", pero al mismo tiempo remarca que las arcas municipales tienen pendiente de cobro 400.000 euros, que son la deuda que mantiene el Govern y el Consell con este Ayuntamiento.
En Maó el nuevo equipo de gobierno ya anunció que una de sus prioridades era pagar las nóminas de los trabajadores y, de momento, ha cumplido su palabra, todo ello a pesar de que las situación de las cuentas públicas "es grave", tal y como advirtió hace unos días el concejal de Servicios Generales, Salvador Botella. Lo mismo sucede con los abonos a proveedores. La deuda con estos últimos supera los 7,1 millones de euros. El propio exalcalde Vicenç Tur reconoció retrasos en el pagos.
Ferreries y Es Mercadal cumplen religiosamente con los plazos de pagos a sus trabajadores y con alguna que otra dificultad a los proveedores. En Es Migjorn sucede prácticamente lo mismo. El nuevo equipo de gobierno ha solicitado una relación de las facturas pendientes para ponerse al día. Además, el objetivo del nuevo alcalde es tener aprobado el presupuesto del actual ejercicio (se prorrogó el de 2010), a finales de julio "para cuadrar cuentas".