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La constructora garantiza la continuidad de las obras

La UTE adjudicataria del nuevo colegio de Camí d'en Guixó asegura no estar preocupada por el retraso en los pagos, por lo que no paralizará el proyecto

colegio. Entre 30 y 40 trabajadores están actualmente en plantilla para poder cumplir el plazo de ejecución de la nueva escuela - Paco Sturla

| Maó |

La UTE formada por Juan Mora S.A. y Dragados S.A., adjudicataria de la construcción del nuevo colegio en Camí d'en Guixó-Vía Ronda de Maó, garantiza la continuidad de las obras "para poder cumplir con el plazo de ejecución marcado" a pesar de que el Ejecutivo autonómico no haya cedido aún el crédito a la administración municipal para efectuar los pagos correspondientes a las certificaciones que la empresa ya ha presentado.

Fuentes de la UTE han anunciado que "aunque no hayamos cobrado ninguna de las facturas presentadas la voluntad de la empresa es mantener el ritmo de las obras y en ningún caso paralizarlas". La empresa ya ha entregado cuatro certificaciones mientras otra está en trámite. Además se prevé que en breve se presenten otras dos, cuantía que ronda el millón de euros.

En este sentido, la constructora asegura "no estar preocupada por el retraso en los pagos" y achaca esta tranquilidad a "la absoluta confianza que tenemos depositada en la administración después de haber desarrollado numerosos trabajos públicos sin haber tenido ningún tipo de problema en este sentido".

El ritmo frenético al que avanzan los trabajos de construcción tampoco va a ralentizarse, según fuentes de la empresa, quienes recalcan que "la poca obra contratada a día de hoy permite volcar todos los esfuerzos en los proyectos que tenemos en marcha y ser fieles al compromiso rubricado con la administración pública y la sociedad".

Cabe recordar que las obras comenzaron el pasado mes de marzo y con un plazo de ejecución de doce meses. La UTE Dragados-Juan Mora cuenta con una plantilla activa en la obra de entre 30 y 40 trabajadores.

A pesar de esta situación, que el Ayuntamiento achaca a la deficiente gestión en el planteamiento de la obra en los últimos meses del anterior mandato, la empresa destaca que esta falta de liquidez administrativa no ha supuesto ningún tipo de conflicto con los trabajadores "quienes no han dejado de cobrar las nóminas".

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