La plaza del Ramal de Alaior acogió ayer tarde la fiesta infantil de los niños saharauis que están en la Isla gracias al proyecto "Vacaciones en Paz" de la Associació d'Amics i Amigues del Poble Sahrauí y que estuvo amenizada con las actuaciones de cuentacuentos, payasos, malabaristas y magos, entre otros.
Martí Carbonell, presidente de la agrupación, explicó que la intención de este acto es, además de que los pequeños interactúen, difundir el problema saharaui a la sociedad menorquina. "Han venido 18 niños, de los cuales dos son discapacitados de la escuela de Dajla. Todavía no se ha realizado ninguna asistencia médica porque ahora empiezan a hacerse las revisiones de pediatría, oftalmología y odontología y, si alguno de ellos lo requiere, recibirá tratamiento".
Noemí Anglada, responsable del proyecto "Vacaciones en Paz", apuntó que son dos meses en los que los niños salen de una realidad muy dura. "Comen bien y se enriquecen en todos los sentidos. Creemos que es positivo".