La resaca de las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo -con una severa derrota para el PSOE- se ha llevado por delante a uno de los pesos pesados de la política menorquina.
El senador Arturo Bagur y presidente de la ejecutiva insular del PSOE, anunció ayer que deja la vida política «después de muchos años de actividad; vuelvo a la vida normal con muy buenos recuerdos».
A primera hora de la mañana escribió en la edición digital de Ultima Hora Menorca que «després de la assamblea de Maó vaig presentar al secretari general la meva renuncia a ser candidat. Es un aclariment que complementa la notícia. Salutacions».
Bagur adoptó la decisión de retirarse después de la asamblea celebrada por la agrupación del PSOE-Maó, en la que sólo catorce militantes se pronunciaron a favor de su nominación como candidato al Congreso de los Diputados, uno apoyó a la actual diputada Gracia Muñoz, mientras que 36 optaron por el voto en blanco.
Al constatar que no había obtenido el apoyo mayoritario de los afiliados del PSOE menorquín (en Ciutadella apostaron por Joana Barceló), el senador renunció a ser candidato a las elecciones generales del 20-N y anunció que se retira de la vida política.
El parlamentario menorquín en la Cámara alta había manifestado a esta redacción su intención de ser candidato al Congreso de los Diputados, pero puso como condición si contaba con el apoyo de la mayoría de afiliados del PSOE-Menorca. No ha sido así, y Arturo Bagur ha optado por tirar la toalla.