Los secretarios generales de las agrupaciones locales del PSOE y el secretario general del partido en Menorca, Marc Pons, arroparon ayer a sus candidatos al Congreso y el Senado, Guillem García Casulla y Elena Baquero respectivamente, durante el acto de presentación celebrado en el hotel rural Sant Joan de Binissaida, en Es Castell. Una presencia dirigida a acallar las reticencias surgidas en torno al proceso de elección de ambos candidatos en el seno del comité insular, que Pons enmarcó en el nuevo momento que vive el PSOE de "renovación" y de "reformulación del proyecto socialista".
García Casulla, conocido por su faceta profesional como médico internista pero con un recorrido en la política local –concurrió a las últimas elecciones como número 9 en la lista del PSOE al Consell-, y Elena Baquero, licenciada en Filosofía aunque dedicada a la gestión pública y la política desde hace 12 años, como concejala socialista en Es Migjorn Gran, se mostraron conscientes de que acuden a las elecciones generales con las encuestas en contra, pero con la ilusión de personalizar el cambio que defendió el secretario general.
"Hemos iniciado un proceso importantísimo, de abrirnos cada vez más y reformular el proyecto socialista, no es fácil, se necesita tiempo para lograr acuerdos amplios, no es algo que se logre de un día para otro y también genera tensiones", manifestó Marc Pons, al tiempo que subrayó que eso demuestra que el partido "está vivo y con capacidad de crítica". Un partido, aseguró, que se encuentra "muy preocupado por la coyuntura económica y la situación que viven Menorca y España" y que se prepara para "batallar y lograr unos buenos resultados en medio de muchas dificultades".
En dicho contexto Pons subrayó la "valentía" y la "humildad" de ambos candidatos. "Sabemos que estando en el poder o en la oposición tenemos gente que se dejará la piel por Menorca", declaró el líder del PSOE.