El Govern no está respondiendo a las reiteradas peticiones del Consell de Menorca para que se transfiera el dinero del convenio social de 2010, por un importe de 2.175.000 euros, que debe permitir resolver en parte la precariedad en que se encuentra la Fundació de Persones amb Discapacitat de Menorca, que además de los servicios que ofrece cuenta con una plantilla de 180 personas. De ese convenio no se ha recibido un euro. Además, el convenio de 2011, con un presupuesto de 2.350.000 euros, sigue sin firmar. La consellera de Bienestar Social, Aurora Herráiz, justo después de tomar posesión ya planteó el problema económico al Govern. Ayer mismo, el presidente Santiago Tadeo insistió en Palma sobre la urgencia de transferir el dinero de 2010, puesto que desde hace dos meses las nóminas del personal de la Fundació se pagan con recursos de otras partidas del Consell. El convenio del año pasado permitió a la entidad conseguir financiación de los bancos, hasta acumular una deuda de 3 millones de euros.
La Conselleria de Bienestar Social trabaja en un plan para reestructurar la Fundació. Uno de los objetivos es contratar un nuevo gerente, después de la baja de Manuel Pons Sintes por motivos de salud. De momento, se ha incorporado un nuevo director técnico, Vicente Lozano, que ya formó parte del equipo directivo de la Fundació y que conocer perfectamente su funcionamiento. La consellera Aurora Herráiz ha destacado la capacidad de este psicólogo para afrontar los nuevos retos de la entidad. Sustituye a Carmen González, que renunció al cargo hace unos meses.
El estudio para una nueva estructura y funcionamiento de la Fundació se ha encargado a las hermanas Eulalia y Maite Brondo, que como abogada y economista tienen experiencia con entidades sociales. Algunos de los datos que más preocupan se refieren a que la facturación de los servicios de jardinería, imprenta y catering social es inferior al coste de personal de los mismos.